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CIUDAD DE MÉXICO, México, jul. 16, 2012.- Como parte de las actividades de su curso de verano, la Secretaría de Protección Civil del Distrito Federal realizó una demostración sobre los riesgos de jugar con cohetes y fuegos artificiales.
La explosión de estos artefactos con pólvora, pueden causar lesiones en la cara, brazos y piernas.
Los últimos meses del año es cuando se eleva el número de niños que son atendidos por quemaduras.
"Durante el año tenemos vamos a decir un niño o 2 niños por mes, pero a partir de septiembre esto se incrementa hasta cerca de 8 o hasta 10 niños aproximadamente, afortunadamente han sido lesiones menores", señaló el Ingeniero Genario Israel Anita Gutiérrez, subdirector de protección civil de la delegación Acapotzalco.
Los cohetes no son juguetes, por lo que se recomienda no comprar este tipo de productos a los niños.
Los padres deben evitar que los menores jueguen con cohetes o los guarden en las bolsas de chamarras o pantalones.
Si este artefacto llega a encenderse, puede causar quemaduras en la piel.
"Es muy fácil para el niño de repente ir a la tiendita comprar el artefacto explosivo, meterselo a la bolsa y con alguna fuente de ignición, ya sea con la misma fricción que va generando calor, ya sea el pantalón o toda la ropa que traen es de nylon, genera una chispa y ahí viene el problema de salud para el niño", destacó Ricardo Villegas Noguez, coordinación de promoción y difusión de protección civil del GDF.
Además pueden provocar la pérdida de dedos y en ocasiones hasta de una mano.
Los menores también recibieron una lección sobre la manera correcta de utilizar el extintor en caso de un incendio.
Con este curso de verano se busca introducir a los niños en la cultura de la protección civil.
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