Artículos relacionados »
CIUDAD DE MÉXICO, México, ago. 7, 2011.- La Iglesia Católica solicitó y obtuvo que se extendiera a México el culto a Juan Pablo II, que estaba limitado a Roma y a Polonia, por ello es que el próximo 17 de agosto llegarán las reliquias para ser veneradas en las diócesis del país.
Lo que se pretende, explicó el director de Comunicación Social de la Arquidiócesis Primada de México, Hugo Valdemar, es fortalecer la fe entre los fieles, tal como lo hacía el propio papa polaco en su viajes y ahora lo hará después de muerto, a través de su reliquias.
En otro rubro, el cardenal Norberto Rivera recordó que la fe es lo que mantiene a los fieles y a la Iglesia, es la que cuando hay dificultades, parece que todo se hunde y no hay salida ni salvación posibles, permite mantener el ánimo y la confianza, explicó el jerarca religioso.
'Sólo se hunde y perece el que pierde la fe o el que cree que con sus propias fuerza va a calmar la tempestad', advirtió Rivera Carrera desde el Altar Mayor de la Catedral Metropolitana.
Durante su homilía de este domingo el prelado recordó que en la Iglesia nunca han faltado tormentas y 'aves de mal aguero han pronosticado su hundimiento; sin embargo, la travesía se mantiene ya por dos mil años sin que se hunda'.
En ese contexto y para fortalecer la fe de los fieles, la Iglesia Católica mexicana acordó por unanimidad solicitar el traslado de las reliquias de Juan Pablo II a México, lo que El Vaticano aceptó y fue así como se concretó su peregrinación por todas las diócesis del país.
Al respecto el sacerdote Hugo Valdemar precisó que las reliquias permanecerán en México cuatro meses para ser expuestas a la veneración de los fieles durante ese periodo.
Del 25 al 28 de agosto estarán en la Basílica de Guadalupe; del 5 al 8 de septiembre en la Catedral Metropolitana, y el resto del tiempo, hasta el 16 de septiembre, recorrerán todas a las diócesis del país.
El vocero de la Arquidiócesis confió en que durante la exposición de las reliquias ocurra algún milagro o un hecho extraordinario en favor de quien lo solicite, para que ayude en el proceso de canonización del beato polaco.
El clérigo señaló que la Iglesia reconoce reliquias de tres tipos: las de primer grado, que son partes del cuerpo, como osamenta o sangre; de segundo grado, como objetos personales que usaba el beato; y de tercer grado, que son objetos que tienen contacto con las de primer grado.
En este caso, a México llegarán reliquias de primer grado, consistentes en sangre de Juan Pablo II, conservada en una ampolleta o cápsula, porque reliquias de segundo grado ya existe en México y se unirán a la de primer grado para el peregrinaje por el país.
[[order]] [[autor]] escribió el [[time | date DD/MM/YYYY HH:mm]]
[[comment]]