Estímulo ayudará poco a economía de EU dice Lacker de la Fed

Se opone a que la Fed ofrezca una guía por adelantado de las tasas, con la que los funcionarios prevén mantener las tasas en niveles muy bajos

WASHINGTON, Estados Unidos, oct. 12-2012.- La nueva ronda de estímulo monetario de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), difícilmente hará algo en favor del crecimiento económico sin una dañina aceleración de la inflación, dijo el presidente de la Fed de Richmond, Jeffrey Lacker.

Lacker, un ortodoxo en política monetaria, que fue el único funcionario en expresar su disenso este año en el Comité Federal de Mercado Abierto del banco central (FOMC, por sus siglas en inglés), dijo que se opuso al anuncio de septiembre de un programa de compras de valores hipotecarios de final abierto por 40,000 millones de dólares al mes.

También se opone a que la Fed ofrezca una guía por adelantado de las tasas, con la que los funcionarios prevén mantener las tasas en niveles muy bajos al menos hasta mediados del 2015.

"Ese lenguaje podría ser interpretado incorrectamente como sugiriendo un menor compromiso para mantener la inflación debajo del 2 por ciento. Yo me opongo a adoptar tal postura, y no creo que mis colegas en el FOMC hayan tenido la intención de dar esa interpretación", dijo en un evento patrocinado por la Escuela Frank Batten de Liderazgo y Políticas Públicas de la Universidad de Virginia.

Lacker dijo que prevé que el crecimiento económico, que registró un ritmo pobre de 1.3% anual en el segundo trimestre, repuntará el próximo año, pero no dio un pronóstico.

La tasa de desempleo bajó considerablemente en septiembre al 7.8% y Lacker dijo que la continua mejora del mercado laboral debería alentar la confianza del consumidor y apuntalar el gasto de las familias.

La confianza del consumidor subió en octubre al mayor nivel en cinco años, de acuerdo con un sondeo de Thomson Reuters y la Universidad de Michigan.

Lacker reiteró además su oposición a las compras de bonos hipotecarios de la Fed. Varias veces ha argumentado que esto favorece a un sector de la economía sobre otros y cruza la línea hacia la política fiscal.

También sostuvo que era optimista de que las tensiones financieras europeas cederían el próximo año, removiendo una nube que ha estado amenazando a la economía de Estados Unidos por meses.