Sicilia anuncia viaje al Vaticano para denunciar violencia en México

Javier Sicilia, fundador del Movimiento por la Paz con Dignidad y Justicia, anuncia un viaje al Vaticano para entregar una carta dirigida al Papa Benedicto XVI y denunciar la creciente violencia en México

CIUDAD DE MÉXICO, México, mar. 17, 2012.- Javier Sicilia, fundador del Movimiento por la Paz con Dignidad y Justicia, anuncia un viaje al Vaticano para entregar una carta dirigida al Papa Benedicto XVI y denunciar la creciente violencia en México

A través de una carta en la que el activista le habla al Papa tú, Sicilia dice que 'sabemos que vienes a México, y que llegas en las proximidades de la Semana Santa, esa semana misteriosa y terrible donde el inocente de los inocentes padece la traición, el sufrimiento y la desesperación, esa semana en la que yo, hace un año y al igual que nuestro Padre, tuvo que padecer el doloroso asesinato de su hijo'.

En el texto, Sicilia también dice que su visita a Roma es para conversar con el Pontífice desde 'el dolor de víctimas' y expresar que 'México vive en el sufrimiento de esa semana desde hace cinco años'.

'Tenemos, según cifras oficiales, 47 mil 551 asesinados de las formas más horribles y despiadadas- esto quiere decir más de los muertos en Irak en el mismo período y casi dos veces más del número de víctimas en Afganistán- más de 20 mil desaparecidos de los cuales el gobierno no puede dar cuenta de su paradero, más de 250 mil desplazados y de migrantes centroamericanos viviendo en condiciones inhumanas'.

'Esto quiere decir que si alguien asesina, secuestra o explota a alguien, hay sólo el 2% de posibilidad - es decir, casi nada- de que se le atrape y se le castigue conforme a la ley'.

En la carta, Javier Sicilia afirma que México y Centroamérica 'son el cuerpo de Cristo abandonado en el Huerto de Getsemani y crucificado en medio de dos delincuentes'.

El activista cita un poema de María Rivera para señalar al Papa Benedicto XVI que más allá del recibimiento que tenga al llegar a México, lo recibirán las víctimas de la violencia.

Parte del texto señala: 'Vienen los que se perdieron por Tamaulipas, la mujer que violaron entre todos antes de matarla, los muertos que enterraron en una fosa en Taxco, (...) los muertos que encontraron en parajes alejados de Chihuahua, (...) los muertos que encontraron colgados en puentes, (...) los que perdimos a nuestros hijos y carecemos de nombre, porque es antinatural'.

'En nombre de ellos, he venido a Roma, Benedicto, para pedirte que en tu visita a México lo abraces'. Sicilia pide al Papa que haga sentir la respuesta de la resurrección frente a la muerte y motive a la Iglesia a retomar la esperanza en la comunión profunda y que sea verdaderamente Madre para responder por el dolor del hijo.

Al denunciar la impunidad, la corrupción y la falta de respuesta del gobierno, Sicilia concluye su carta y señala a Benedicto XVI que encontrará en México, 'el cuerpo destrozado de Cristo que pide en sus víctimas la respuesta del Padre por encima del orden político y del desorden criminal'.