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TOKIO, Japón, sep.19, 2012.- Las firmas japonesas con factorías en China reanudaron sus operaciones en ese país luego de que las protestas por la nacionalización de unas islas en disputa bilateral prácticamente cesaron.
Las automotrices Nissan, Mazda y Suzuki reiniciaron sus actividades este miércoles luego de que las habían suspendido por motivos de seguridad ante las manifestaciones antijaponesas en decenas de ciudades chinas, afirmó un reporte de la agencia Kyodo.
A ese grupo se unió Casio Computer Co. que había anunciado la suspensión de actividades de su planta en la provincia de Guangdong, al igual que lo hicieron las tiendas de conveniencia Seven-Eleven y Lawson, así como la cadena de supermercados Ito-Yokado.
El despacho de la agencia Kyodo agregó que la embajada japonesa en Pekín carecía de informes sobre nuevas protestas este miércoles.
Además, la policía de la capital china (Pekín) envió mensajes de texto a los teléfonos celulares de los habitantes capitalinos, pidiéndoles no atender nuevas convocatorias de manifestaciones, agregó la oficina diplomática.
De acuerdo a la agencia japonesa de noticias, este martes cuando se recordó el inicio de la invasión japonesa al oriente chino, hubo manifestaciones antijaponesas en unas 100 ciudades chinas, y a lo largo del día unos 10 mil manifestantes se dieron cita frente a la embajada japonesa en Pekín.
En tanto, el secretario del gabinete de gobierno japonés, Osamu Fujimura, aseguró que se mantiene la vigilancia sobre las patrulleras chinas que se han acercado al archipiélago Sensaku, que reclaman China, Japón y Taiwán, pero controlado por el segundo país.
Según Japón, han entrado a las aguas adyacentes a las Sensaku 13 patrulleras chinas.
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