Realizan censo de población en Venezuela

Encuestadores tendrán la meta de visitar 7.5 millones de hogares; Chávez insta a venezolanos a participar

CARACAS, Venezuela, sep. 1, 2011.- El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) comenzó este jueves un censo de población en Venezuela, salpicado por objeciones de algunos sectores de la oposición mientras el Gobierno lo ha defendido como una "oportunidad" para planificar políticas.

A diferencia de años anteriores, la consulta ha levantado roncha entre quienes ven con recelo algunas de las 69 preguntas del cuestionario, que aplicarán unos 18 mil empadronadores vestidos con chaleco y gorra gris y quienes portan un dispositivo móvil.

"Si usted se siente invadido, requerido en informaciones que usted no está dispuesto a dar, usted tiene el derecho a no responderla, se lo garantiza el artículo 60 de la Constitución", dijo a periodistas el presidente del partido Copei, Roberto Enríquez, que ha cuestionado seis preguntas.

Aludió así al artículo que garantiza la protección del honor, vida privada y confidencialidad de los ciudadanos, aunque el dirigente opositor aclaró que no se trata de boicotear el censo y pidió "tratar bien" a los encuestadores.

"El problema aquí es político, es de un Gobierno que utiliza inescrupulosamente la información de los venezolanos, que abusa, que tiene una obsesión por controlarle la vida a todos los venezolanos", argumentó Enríquez.

El presidente del INE, Elías Eljuri, ha salido al paso de estos señalamientos, al indicar que el censo "es la oportunidad" para que los organismos oficiales "puedan tener una planificación más cercana a la realidad".

"Si se pierde la oportunidad de tener un buen censo (...) el país solo puede disponer de información a nivel nacional (...), pero la información a nivel de un municipio para planificar, por ejemplo, cuántas escuelas necesitan, cuántos dispensarios necesitan (...) no es posible tenerla", argumentó en declaraciones a Efe.

También defendió, en diálogo con periodistas, que las preguntas "desde el punto de vista técnico se justifican plenamente".

"Estas son las mismas preguntas que se realizan a nivel internacional en todos los países", sostuvo el funcionario, quien subrayó que el cuestionario "ha sido revisado exhaustivamente por organismos internacionales y nacionales".

Aclaró que el censo no es "invasivo" y garantizó "la confidencialidad de los datos".

Consultado sobre los temores frente al censo, el presidente de la empresa de sondeos Datanalisis, José Antonio Gil, aseguró a Efe vía telefónica que esto puede responder "al clima de desconfianza generalizado que producen los sistemas políticos que tratan de concentrar demasiado poder".

Ante ello, Rafael Cadenas, coordinador nacional del proyecto de empadronamiento del censo, aseguró a Efe que "en ningún caso" están preguntando "para intimidar a las personas".

Desde muy temprano el presidente del país, Hugo Chávez, llamó desde su Twitter a participar de esta consulta.

"Arrancó el Censo 2011! Todos a participar! Felicito al Dr. Elías Eljuri y a todo el personal de nuestro Instituto Nacional de Estadística!", escribió Chávez desde el Hospital Militar, donde se somete a la tercera fase de su tratamiento de quimioterapia contra el cáncer que le diagnosticaron en junio pasado.

Uno de los dirigentes de la oposición, el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, también pidió que se reciban los encuestadores y aseguró que lo hizo en su casa, pese a que algunos ciudadanos temen contestar el censo en su vivienda.

"Es muy importante que en el país sepamos cuántos venezolanas y venezolanos somos", declaró a periodistas.

"Si alguna persona no se sabe una pregunta no es que se tranca (bloquea) la computadora, usted pasa a la siguiente", añadió Capriles.

Eljuri ha anticipado, por su parte, que aquellos estados donde no se refleje la población real recibirán menos recursos del situado fiscal o distribución nacional.

Los encuestadores tendrán la meta de visitar 7,5 millones de hogares y muchos de ellos, además de acreditar estudios, residen en las zonas que se les asignarán para empadronar.

Pedro Méndez, un empadronador de 22 años, explicó a Efe que parte de su labor será aclararle a los entrevistados que este proceso "no responde a ninguna bandera política" y emplea "una tecnología de vanguardia" que no permite extraer la información de los dispositivos, pues se enviará directamente a una central.