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DALLAS, Estados Unidos, feb. 20, 2011.- El hijo del ex agente de la DEA, Enrique "Kiki" Camarena, asesinado en México hace más de 25 años, dijo que confía en que México y Estados Unidos den 'una respuesta rápida y adecuada' al homicidio de otro policía estadonidense.
Enrique Camarena Jr, quien tenía 11 años de edad cuando su padre fue torturado y asesinado en 1985, vive con su familia en San Diego, California, y trabaja como abogado para la procuraduría del Condado de San Diego.
En declaraciones a una televisora de Texas dijo que el homicidio del agente de la Oficina de Servicios Migratorios y Aduaneros (ICE) de Estados Unidos, Jaime Zapata, el pasado martes en el estado mexicano de San Luis Potosí, le ha traído recuerdos dolorosos.
"Usted sabe que, obviamente, trae recuerdos difíciles', señaló en declaraciones a la estación de televisión KRGV que transmite desde la comunidad de Weslaco, para todo el valle del sur de Texas.
La muerte de Zapata esta semana, 'también provee que la comunidad de policías se cohesione y que nuestra nación se una', afirmo Camarena Jr.
"Recuerdo que cuando mi padre sostenía conversaciones conmigo, cuando yo tenía unos 10, sobre lo peligroso que era su trabajo, yo le decía que quería ser policía, que quería ser como él y ser un agente de policía', afirmó.
'El absolutamente me hizo jurar que yo no sería un agente de policía, que era demasiado peligroso', rememoró.
'Creo que él tenía siempre en mente los peligros a los que se enfrentaba'.Camarena Jr, cumplió el juramento a su padre al no abrazar la carrera de policía y graduarse como abogado para servir como fiscal.
Es otra forma de hacer cumplir con la ley, explicó. El agente antinarcóticos Enrique "Kiki" Camarena es honrado cada año a lo largo de todo Estados Unidos, al celebrarse la 'Semana del Listón Rojo' en miles de planteles escolares del país para advertir a los niños sobre los peligros de consumir drogas.
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