La convención latina

Esta semana se realiza en Charlotte la Convención Nacional Demócrata; el objetivo es catapultar los logros de Barack Obama y garantizar el voto latino

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CHARLOTTE, Estados Unidos, sept. 4, 2012.- Durante los próximos tres días los demócratas estarán reunidos en Charlotte, Carolina del Norte, para dar el banderazo oficial de la reelección de Barack Obama.

En estos días se buscará un objetivo: contar la historia de los logros de Obama. El rescate de la industria automotriz; el de la industria de la manufactura; el fin de la guerra en Irak y Afganistán; la captura y muerte de Osama bin Laden; la reforma al sistema de salud y la energética?todo con una meta en mente: luchar para que la clase media estadounidense se fortalezca.

El equipo de Obama busca que a la sencilla pregunta de ¿están hoy mejor que hace cuatro años? la respuesta sea un sí.

En este primer día el centro de atención es un joven de nombre Julián Castro, quien dará el discurso principal esta noche, previo al de Michelle Obama. El alcalde de San Antonio es una estrella en ascenso en la política estadounidense. Hoy se convertirá en el primer hispano en hablar desde el escenario de la Convención Nacional Demócrata.

Con sólo 37 años, algunos lo perfilan como el próximo gobernador de Texas. Otros incluso especulan con que podría ser el primer presidente de origen hispano de Estados Unidos.

Castro se dirigirá a una audiencia en la que estarán presentes 800 delegados de origen hispano, la mayor cifra en la historia de las convenciones.

En su discurso, Castro hablará de sus raíces mexicanas, del activismo de su madre Rosie Castro y del papel tan importante que están teniendo los hispanos en esta elección.

Y es cierto. A diferencia de hace cuatro años, en esta campaña la atención puesta en los hispanos es incomparablemente mayor. En Tampa, en el marco de la Convención Republicana, oradores y videos de hispanos no faltaron. La cereza del pastel fue el discurso de uno de los hijos de Mitt Romney hablado una parte en español.

Ahora en Charlotte los eventos hispanos están a la orden del día. En todos ellos los oradores hablan de la agresividad con la que empujarán la agenda hispana. Mencionan la importancia de la comunidad para la elección del mes de noviembre. Enfatizan una y otra vez que sin el voto latino no se pueden ganar las llaves de la Casa Blanca.

Por una parte este discurso es cierto. Los estados clave de la elección de noviembre, como Colorado, Nevada y Florida tienen una población hispana importante.

Pero sigue habiendo poca claridad en como enfocar los esfuerzos y hacia dónde. Así lo pudimos ver el día de hoy en el evento organizado por la National Hispanic Leadership agenda en donde su director, Héctor Sánchez, no pudo responder exactamente qué es lo que los hispanos quisieran de quien gane la presidencia en noviembre.

¿Qué opinión tienen de la plataforma política de los demócratas dada a conocer la noche del lunes 3 de septiembre?, se le preguntó a Sánchez. Su respuesta: empujaremos muy agresivamente para que se aplique lo que para nosotros es importante.

Respuesta vaga y sin enfoque, si se quiere avanzar más allá del discurso sobre la importancia del voto hispano.

Veremos esta noche si Julián Castro es más atinado.