CIUDAD DE MÉXICO, México, sep. 24, 2012.- Por tierra y aire, autoridades y familias de Reynosa, Tamaulipas, realizaron la búsqueda de posibles desaparecidos por la explosión en instalaciones de Pemex el pasado martes 18 de septiembre.
El operativo fue apoyado por un helicóptero y una avioneta en las inmediaciones de la Planta Burgos donde ocurrió el desastre que dejó 30 muertos y 42 lesionados.
Los deudos solicitaron apoyo al Ayuntamiento porque no localizan a sus familiares y aún no han sido identificados con las pruebas de ADN.
"Mi esposo le tocó ese lamentable día trabajar en ese lugar ¿Que le han dicho las autoridades a donde ha ido porqué no lo ha encontrado? Yo estoy en contacto con la PGR me están apoyando y todo únicamente falta esperar las respuestas del ADN", dijo Patricia Galván, esposa de desaparecido.
"Anduvimos buscando por parte del gobierno del estado y del municipio algunos cuerpos que no han podido aparecer, sé que la PGR también está haciendo algunas pruebas a los cuerpos que han estado encontrando para saber a qué familiares los entregan. Ocho cuerpos han sido entregados."
Para las familias, el tiempo que se ha llevado en dar los resultados del ADN ha sido muy largo y de incertidumbre.
"Que nos van a ayudar ya nos dijeron sí, lo que queremos es que agilicen las pruebas del ADN para saber si nuestro familiares todavía están ahí o buscarlos", pidió la señora María de la Luz Morales, familiar de un trabajador desaparecido.
"Por medio de pruebas genéticas, hay familiares que han reclamado un mismo cuerpo, entonces la procuraduría tiene que ser muy cuidadosa en ese sentido", externó por su parte Aida Zulema Flores Peña, secretaria del Ayuntamiento de Reynosa.
Petróleos Mexicanos ha manifestado que los desaparecidos están contabilizados dentro de los 30 fallecidos.
Este lunes informó que aún permanecen hospitalizados por el accidente en Reynosa 15 trabajadores: 2 de Pemex y 13 de empresas contratistas. Nueve están en el Seguro Social de Reynosa; uno en un hospital particular, y 5 en el Seguro Social de Monterrey, Nuevo León.
De acuerdo con las autoridades los resultados de las pruebas de ADN podrían tardar hasta 30 días.
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