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CHERÁN, México, jul 11, 2012.- Habitantes de Cherán, Michoacán, velaron este miércoles a los comuneros Guadalupe Gerónimo y Urbano Macías, de 28 y 48 años, secuestrados el pasado fin de semana y encontrados muertos la tarde del martes.
Tras su desaparición, comuneros de Cherán se trasladaron a Morelia y bloquearon el edificio del Congreso del estado para exigir la localización de sus compañeros.
Entraron hasta el patio del congreso y exigieron ser atendidos por los diputados. Algunos llevaban el rostro cubierto.
Salieron varios diputados y recibieron un documento con algunas demandas. Luego forzaron la puerta del salón de sesiones e irrumpieron en el recinto.
Exigieron su intervención ante la falta de atención al problema de la inseguridad en Cherán. Luego de unos 10 minutos, los comuneros salieron del salón y del patio.
Con una cuerda bloquearon la puerta del Congreso y sólo permitían salir a las mujeres.
Más tarde, se dio a conocer que en el municipio de Zacapu fueron encontrados los cuerpos de los comuneros.
"Las características de uno de ellos particularmente son muy específicas nos dan la idea de que precisamente de los dos comuneros que habían desaparecido de la comunidad de Cherán", dijo Jesús Reyna, Secretario de Gobierno Michoacán.
Entonces, los habitantes de Cherán que permanecían afuera del Congreso amenazaron con quedarse en el lugar para exigir justicia.
"Queremos justicia primero que nos entreguen aquí a los culpables, ya no son los primeros son 16 ya con estos dos que acaban de confirmarnos de su muerte", afirmó uno de los comuneros.
Reforzaron el bloqueo a los accesos del congreso, aun cuando en el interior permanecían diputados y empleados.
"Me acerqué de una manera informal a un diálogo personal? Ellos nos piden que solucionemos el problema, sin embargo no es una atribución de los diputados", señaló Alfonso Martínez, diputado PAN.
Por la noche los comuneros abandonaron el Congreso. Se dirigieron al Palacio de Gobierno donde una comisión fue recibida por el Secretario de Gobierno.
El gobierno de Michoacán ofreció investigar los hechos.
"No tenemos un solo elemento para decir que fue un problema entre comunidades, un problema de tala ilegal o que fue un problema de crimen organizado", comentó Jesús Reyna, secretario de Gobierno Michoacán.
Tras la reunión, los comuneros regresaron a Cherán para velar y sepultar a sus muertos.
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