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CIUDAD DE MÉXICO, México, mar. 1, 2012.-El Senado condenó enérgicamente las agresiones contra cuatro legisladores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) al tratar de ingresar al penal de El Amate, en Chiapas, para verificar las condiciones en las que está recluido el ex gobernador Pablo Salazar Mendiguchía.
Además, rechazó categóricamente cualquier acto que atente contra la integridad física de los senadores y senadoras, y anunció que estará atento al desarrollo de la investigación de estos hechos.
Sin embargo, debido a un acuerdo entre el Partido de la Revolución Democrática (PRD), PVEM y PRI, el senador José Luis García Zalvidea retiró su petición al gobernador del estado, Juan Sabines, de que ordenara una investigación inmediata de estos hechos.
El legislador perredista informó al pleno que el pasado miércoles 29 intentaron ingresar al penal de Cintalapa, Chiapas, para entrevistarse con Salazar Mendiguchía, visita que "fue autorizada por las autoridades penitenciarias del estado de Chiapas".
Sin embargo, al llegar al reclusorio, y "ante la pasividad de los elementos de seguridad, de manera violenta una turba" trató de impedirles el acceso, y el vehículo en el que viajaban fue rodeado y retenido por más de una hora por la multitud, incluso trataron de volcarlo", agregó.
García Zalvidea sostuvo que "los agresores no procedieron de manera espontánea; estaban perfectamente dirigidos por instigadores profesionales que actuaron a ciencia y paciencia de las fuerzas de seguridad de pública del estado".
Afirmó que "entre los provocadores, fue posible identificar a Florencio Madariaga de la Cruz, funcionario de la Procuraduría General de Justicia del estado, adscrito al Fiscal de Asuntos Relevantes".
También fue identificado "Andrés Álvarez Rodríguez, líder de la denominada Unión de Comunidades Productivas La Casita, de reconocida cercanía política al actual gobernador".
A su vez, el senador Leonel Godoy Rangel pidió investigar las agresiones, pues si quedan impunes "se crispará aún más" el ambiente político", al que calificó como desproporcionado.
Sin embargo, el legislador del PVEM, Arturo Escobar, sostuvo que Salazar Mendiguchía cometió "delitos deleznables" y que la visita fue en un día en el que no están permitidas, y dijo a los senadores que "cómo esperaban que los recibieran en un penal sobrepoblado".
Su intervención fue interrumpida por el senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Carlos Jiménez Macías, quien señaló que estaba de acuerdo con sus críticas al sistema carcelario, pero que ello no justificaba las agresiones, lo que fue "una arbitrariedad".
Escobar respondió que no se justifica la agresión a algún legislador, pero que el caso tenía implicaciones político electorales que no ameritaban que se pidiera a la Procuraduría de Justicia estatal una investigación inmediata.
Por su parte, el senador del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Tomás Torres, propuso a García Zalvidea retirar su demanda para no caer en conflictos político electorales, quien finalmente aceptó retirarla.
SE DESLINDA GOBIERNO ESTATAL DE AGRESIÓN
El secretario de Gobierno de Chiapas, Noé Castañón, deslindó a la autoridad estatal de la agresión y provocación que ayer sufrieron senadores del PRD en el penal El Amate.
Entrevistado al término de la instalación del Consejo General del Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana, afirmó que el grupo de personas que se inconformó tiene expresiones de repudio al ex gobernador desde 2005.
"Esas manifestaciones -explicó-, las vienen haciendo donde ellos consideran, aunque después lograron entender que se trataba de una visita al ex gobernador, permitieron el paso y luego abordaron a los senadores", dijo.
El funcionario estatal rechazó también que el gobierno haya azuzado a los presos para protestar en contra de los legisladores Leonel Godoy, Rubén Velázquez López, Carlos Sotelo y José Luis García Zalvidea, así como del hijo del ex mandatario chiapaneco Pablo Salazar López.
"Si hubo una protesta al interior de la penitenciaría en el momento en que los senadores ingresaron, fue un repudio de la población porque ellos estimaron que se estaban dando canonjías que a ellos no se les brinda", aclaró.
Agregó que nunca estuvo en riesgo la integridad del ex gobernador, fue una manifestación espontánea de los presos.
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