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CIUDAD DE MÉXICO, México, jul. 6, 2011.- El crimen organizado es la principal amenaza a los Derechos Humanos, las libertades y los regímenes de derecho en México y en América Latina, afirmó el presidente Felipe Calderón, quien destacó que por ello en el país se utilizan todas las herramientas del Estado para impedirlo.
En el salón Adolfo López Mateos de Los Pinos, reiteró que son precisamente los criminales, "más que el Estado", los que están permanentemente atentando contra los periodistas, activistas, migrantes y ciudadanos honestos e inocentes en las naciones.
En el acto Derechos Humanos, México y la ONU: Construyendo Futuro, el mandatario dejó claro que en el país se realiza un esfuerzo extraordinario en ese sentido "sobre las normas ordinarias, (pues) no hay régimen excepcional".
"Estamos enfrentando a este insólito desafío con un esfuerzo extraordinario, pero sin normas extraordinarias; así sea que estén previstas y desde hace mucho tiempo en la Constitución Mexicana. Esta diferencia es fundamental compartirla", expresó.
Acompañado por su esposa Margarita Zavala y por el secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora, el Presidente Calderón resaltó que su administración combate al crimen con firmeza "porque no hay otra manera de hacerlo eficazmente", pero siempre con la plena conciencia de que nuestra primera obligación es observar la ley.
Mencionó que a la par de esta lucha por la seguridad se han emprendido transformaciones de fondo para ofrecer a los ciudadanos un sistema legal renovado, más transparente y más eficaz, que proteja mejor los derechos de todos.
Mencionó que estos avances están comprendidos en las reformas constitucionales en materias de derechos humanos y de amparo, así como en las nuevas leyes de Migración y de Refugiados y en la reforma del Sistema de Justicia Penal.
Todas esas reformas representan la ampliación de derechos más grande de la historia contemporánea de México "y de muchas otras naciones", con lo que se pone al país a la vanguardia mundial en la protección de las garantías fundamentales.
Reconoció que aún falta mucho por hacer, pues se debe perseverar para ofrecer más protección a quienes desde las organizaciones sociales se encargan de promover y defender los Derechos Humanos.
El Presidente Felipe Calderón firmó el acuerdo por el que se establecen las bases del mecanismo de protección de defensoras y defensores de los Derechos Humanos.
Ello mediante la instrumentación de acciones coordinadas que, en el ámbito de sus atribuciones, desarrollarán la Secretaría de Gobernación, las dependencias y entidades de la administración pública federal y la Procuraduría General de la República (PGR).
Calderón Hinojosa, quien antes se reunió con la alta comisionada de la ONU para Derechos Humanos, Navi Pillay, expresó que México debe mucho a los defensores de los Derechos Humanos "y hoy damos un paso importante para que desarrollen su labor con mayor seguridad".
Al respecto el Ejecutivo federal instruyó a las dependencias involucradas para que trabajen con celeridad en el cumplimiento de este acuerdo y redoblen esfuerzos para que se apliquen a la brevedad este mecanismo de protección a los Derechos Humanos.
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