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CIUDAD DE MÉXICO, México, jun. 4, 2011.- La primera gran Caravana por la Paz en México, que recorrerá varios estados mexicanos, arrancó de la mano de un poeta con la promesa de generar "un cambio de corazones que permita rescatar la vida democrática" en el país, azotado por la violencia del narcotráfico y el crimen organizado.
A bordo de 13 autobuses y decenas de automóviles particulares, los cerca de 300 activistas que integran la primera etapa de la caravana partieron de Cuernavaca, la capital del estado de Morelos, con rumbo a la capital mexicana, donde celebraron un breve mitin en el monumento al Ángel de la Independencia.
El contingente recorrerá los estados de Morelos, Distrito Federal, Estado de México, Michoacán, Jalisco, Guanajuato, San Luis Potosí, Durango, Zacatecas, Coahuila, Nuevo León y Chihuahua hasta el próximo 10 de junio, y en el camino se irán sumando más participantes.
Se trata de la primera protesta de carácter nacional que busca alzar la voz por las cerca de 40 mil muertes que se ha cobrado la violencia del crimen organizado en México desde el inicio de la administración del presidente mexicano, Felipe Calderón, en diciembre de 2006.
El mandatario encabeza desde entonces una campaña sin tregua contra esos grupos criminales con el apoyo de unos 50 mil soldados y 20 mil agentes federales.
La caravana por la "paz, justicia y dignidad", que recorrerá 12 de los 32 estados del país, es liderada por el poeta mexicano Javier Sicilia, cuyo hijo Juan Francisco fue asesinado a fines de marzo pasado en Cuernavaca por integrantes del cártel del Pacífico, junto con otras seis personas.
El homicidio impulsó a Sicilia a organizar una marcha a pie a finales de mayo de Cuernavaca a Ciudad de México, en la que participaron unas cinco mil personas para exigir la reconstrucción del país, "destruido" por la criminalidad y la violencia.
El escritor ha ganado mucha notoriedad en el país e incluso se ha reunido ya con el presidente Calderón. Además, el caso de su hijo fue atraído por la Policía Federal, organismo que ya capturó a la mayor parte de los autores materiales e intelectuales del crimen.
Sicilia dijo este sábado en la Ciudad de México que la caravana es "la respuesta a la noche que nos han impuesto en esta guerra y a través de instituciones que no están cumpliendo con su vocación primera, que es servir a la nación y a los ciudadanos".
Los organismos del estado "están cumpliendo con una vocación criminal que es servir a las instituciones y servir a sus intereses", sostuvo el poeta ante sus seguidores, momentos antes de abordar los autobuses que los llevarán a la siguiente parada de la gira.
"Si protegemos intereses, si el punto fundamental de la vida, como lo han marcado tanto los políticos como los criminales, es el poder por el poder y el haya sido como haya sido, y el dinero a costa de lo que sea, vamos a perder nuestra dignidad", apuntó Sicilia, criticado por algunos sectores por culpar más a las autoridades que a los delincuentes por la violencia del país.
El movimiento de Sicilia, que empezó más como un clamor de justicia de un padre, se ha estructurado y ahora propone, entre otras cosas, la mejora de los procesos de administración de justicia, un cambio del enfoque militarista en la lucha contra el crimen organizado por uno de seguridad ciudadana y el retiro del fuero a funcionarios para combatir la corrupción y la impunidad.
La caravana llegará este sábado a Toluca, capital del Estado de México, y después se dirigirá al occidente del país para hacer escala en Morelia, Michoacán, desde donde partirá el cinco hacia Guadalajara (Jalisco) y después León (Guanajuato).
El día 6 el contingente celebrará actos en las ciudades norteñas de San Luis Potosí, Zacatecas y Durango, capitales de tres estados homónimos; y al siguiente recorrerán ciudad de Torreón, en el estado de Coahuila, así como Monterrey, la capital de Nuevo León.
El 8 de junio los manifestantes regresarán a Torreón para viajará Chihuahua, donde visitarán la ciudad de Carmago y la capital de ese estado fronterizo con Estados Unidos.
La última escala del largo recorrido es Ciudad Juárez, la urbe más violenta del país, adonde Sicilia llegará el 9 de junio para suscribir al día siguiente el pacto nacional que busca la reconstrucción del país.
Esa ciudad es la "más dolida del país, el símbolo de nuestro dolor y de lo que puede volverse el país si no hay una orientación en la vida política de la nación", sostuvo el poeta.
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