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ARIZONA, Estados Unidos, feb. 14, 2013.- Luego que Mabel Muñoz fue detenida por la policía mientras conducía hacia el dormitorio de su universidad, la estudiante con mención honorífica sintió miedo al enterarse de que podría pasar la noche en prisión con delincuentes por el mero hecho de no contar con una licencia para conducir.
"Fue horrible", recordó Muñoz después de una audiencia efectuada el jueves en la Cámara de Representantes de Arizona sobre licencias de conducir para inmigrantes sin residencia legal en Estados Unidos. "He estado acatando las reglas, pero no puedo acatar esta porque no me permiten obtener una licencia de conducir".
En un estado que ha ocupado los titulares de la prensa por sus campañas contra inmigrantes no autorizados, los legisladores demócratas de Arizona están exhortando a sus homólogos republicanos ampliar las licencias de conducir a jóvenes inmigrantes a los que el gobierno federal les ha suspendido temporalmente la deportación. Pero los líderes republicanos dicen no estar interesados.
La legislación patrocinada por la representante demócrata Catherine Miranda permitiría conducir legalmente en Arizona a inmigrantes que han obtenido autorización del gobierno federal para trabajar en Estados Unidos.
El Comité de Transporte de la Cámara de Representantes estatal escuchó a los defensores del proyecto de ley el jueves, pero no sometió la propuesta a votación.
Durante la audiencia, la presidenta del comité Karen Fann dijo que no pediría una votación sobre el proyecto de ley porque quería que los legisladores asimilaran el tema sin distracciones.
"Es momento de que escuchemos", dijo. "En ocasiones estamos tan frustrados, estamos tan ocupados gritando que nos olvidamos de parar y escuchar".
HVI
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