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MADRID, España, nov. 10, 2012.- El suicidio de una mujer de 53 años en la localidad vasca de Barakaldo, norte de España, cuando se iba a embargar su vivienda, ha generado numerosas protestas ciudadanas contra la banca.
Con el caso de Amaya Egaña, viernes, son ya dos los suicidios por las mismas razones este mes en España, donde desde que inició la crisis económica en 2008 se han hecho 350 mil desahucios y otros 250 mil están en proceso.
La plataforma Stop Desahucios Bizkaia realizó la víspera una manifestación por las calles de Barakaldo y otras ciudades de esa provincia vasca, mientras que este sábado numerosas sucursales bancarias amanecieron con pintadas o carteles pegados.
Los mensajes dicen "banca asesina" y otros con el mismo significado escritos en euskera (lengua vasca) "hiltzaileak".
La portavoz de la plataforma, Marta Uriarte, urgió al gobierno medidas concretas para evitar que las personas sean desalojadas de sus viviendas y se encuentren otras formas de tratar los endeudamientos en las hipotecas con la banca.
Pidió urgencia para generar moratorias para las familias que no pueden pagar sus casas y reiteró que muchas personas están a merced de la banca, por tanto evitar más sucesos como el de la muerte de Egaña.
Al conocerse el suicidio en Barakaldo, el gobierno español reaccionó con un anuncio de que se trabaja una reforma legislativa con el opositor Partido Socialista Obrero Español (PSOE), la que podría ser anunciada el lunes.
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