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PARÍS, Francia, mar. 13, 2012.- La cuestión del supuesto financiamiento por parte del ex líder libio, Muammar Gadafi, de la campaña electoral que llevó a Nicolas Sarkozy a la presidencia de Francia en 2007, fue abordada por primera vez hace un año, justo antes de que aviones de combate galos lanzaran los primeros bombardeos contra posiciones del Ejército de Gadafi, en Libia; Francia se convertía entonces en el país más belicoso anti-Gadafi del hemisferio occidental.
Fue el hijo predilecto del fallecido dictador, Saif al Islam, quien se encargó de sacar el explosivo tema a la arena pública. En marzo de 2011 exclamó con vehemencia en una entrevista exclusiva concedida a la cadena de televisión Euronews: "Somos nosotros quienes financiamos su campaña electoral. Ahora lo primero que debe hacer ese payaso (Sarkozy) es devolvernos el dinero. Tenemos todos los detalles que revelaremos próximamente." El Palacio del Eliseo lo desmintió inmediatamente.
El asunto volvió a surgir el pasado lunes, cuando el sitio francés de información Médiapart aseguró haber consultado atentamente una serie de documentos confidenciales que apuntan a que Gadafi otorgó 65 millones de dólares para la campaña electoral de Sarkozy de hace cinco años. La preparación de las modalidades de financiamiento de dicha campaña corrió a cargo -siempre y cuando según los documentos evocados- del intermediario de contratos de armamento, el franco-libanés Ziad Takkiedine, organizador de visitas de Nicolas Sarkozy y de su brazo derecho Brice Hortefeux en Libia, en 2005, cuando el actual jefe de Estado ocupaba la cartera del Interior.
Interrogado por la primera cadena de televisión francesa TF1 sobre los reportes de Médiapart, Sarkozy los calificó de "grotescos". "Es ridículo "- dijo visiblemente molesto-, "y me extraña sobremanera que me hagan preguntas en torno a eso" - agregó. Pero un ejército de periodistas se lanzó al instante a la búsqueda de nuevos detalles.
El diario de izquierdas "Libération" pública en su edición del martes 13 de febrero varios documentos consultados por el sitio Médiapart, que forman parte del legajo de una investigación judicial sobre el caso, actualmente en curso. En ellos se sugiere que el dinero procedente de la venta al régimen de Gadafi por parte de Francia de un sistema de espionaje por internet, efectuada en 2007, pudo haber servido para engordar las cuentas de la primera campaña presidencial de Sarkozy.
En un documento aparece la cantidad de 65 millones de dólares que fueron entregados a Jean-Charles Brisard, responsable de una empresa gala de espionaje y amigo de uno de los médicos de la familia Gadafi.
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