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BEIRUT, Líbano, feb. 4, 2012.- Más de 200 personas murieron el sábado en la convulsionada ciudad de Homs cuando las fuerzas sirias lanzaron una aplastante ofensiva con disparos de morteros y artillería, dijeron activistas, en lo que parece el episodio más cruento en el levantamiento contra el régimen del presidente Bashar Al Assad. Otras 21 personas murieron abatidas por las fuerzas de seguridad en otras partes del país.
Pese a la indignación internacional por el ataque, Rusia y China vetaron un proyecto de resolución en las Naciones Unidas de condena a la represión de Assad y en respaldo de llamamientos árabes de que deje el poder. Naciones occidentales y árabes gestionaron hasta último momento el respaldo ruso infructuosamente, pero decidieron buscar la votación para poner a Moscú en evidencia.
El gobierno sirio desmintió el ataque y dijo que las cifras de muertos denunciadas eran parte de una "campaña histérica" de incitación de sus oponentes para lograr una medida de la ONU.
El veto en el Consejo de Seguridad subraya lo que parece ser la estrategia de Assad de depender de la protección rusa en el exterior, aunque el derramamiento de sangre en Homs, la tercera ciudad siria, provocó enérgicas censuras.
"El régimen de Assad debe terminar", afirmó el presidente estadounidense Barack Obama en una declaración el sábado, y pidió al Consejo de Seguridad que se "alce contra la brutalidad implacable del régimen de Assad".
Túnez decidió expulsar al embajador sirio en reacción a la "cruenta matanza" y dejó de reconocer al régimen de Assad, dijo la oficina presidencial en una declaración. Sirios indignados irrumpieron en las embajadas sirias en Berlín, Londres, Atenas, El Cairo y Kuwait. En la capital egipcia incendiaron parte de la delegación.
En Homs, millares de personas asistieron a una ceremonia fúnebre en un parque por unas 60 víctimas del ataque. Fotos colocadas en línea por activistas muestran docenas de féretros y cadáveres envueltos en túnicas blancas en medio de una multitud de dolientes.
En el distrito más afectado, Jaldiye, los residentes averiguaban sobre sus familiares después de pasar la noche escondidos en sótanos, y otros limpiaban las calles de vidrios, escombros y sangre. Los edificios presentaban orificios, las fachadas de algunas casas se habían desplomado hacia adentro, y por lo menos 30 edificios quedaron inhabitables por los daños, dijo el activista local Majd Amer.
Miles de personas protestaron en varias ciudades sirias en solidaridad con la ciudad devastada. "Homs, tu sangre no será en vano", rezaba una inscripción en un suburbio de Damasco.
Por lo menos 21 personas murieron el sábado en hechos de violencia en otras partes del país, incluso 12 abatidos por las fuerzas de seguridad que dispararon contra una procesión fúnebre en el suburbio damasquino de Daraya un día anterior, según el Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña.
Hubo indicios de que el ataque a Homs, la tercera ciudad siria, fue en respuesta a medidas de desertores del ejército por afianzar su control de varios vecindarios.
ONU: RUSIA Y CHINA VETAN RESOLUCIÓN SOBRE SIRIA
Rusia y China vetaron el sábado una resolución que respaldaba el plan de paz de la Liga Arabe para Siria, el cual exhortaba al presidente Bashar Al Assad a renunciar.
Los otros 13 miembros del Consejo de Seguridad, incluidos los permanentes Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña, votaron a favor de la resolución, cuyo objetivo es detener la violencia en Siria.
El inusual veto doble fue emitido después de días de negociaciones que buscaban superar la oposición rusa al proyecto de resolución. Varios enviados europeos dijeron antes de la sesión que se sentían obligados a pedir la votación a pesar de los intentos de Rusia por buscar un aplazamiento debido a las medidas de fuerzas cada vez más violentas del régimen de Assad.
La urgencia se acentuó con un ataque de las fuerzas armadas sirias disparando morteros y artillería sobre la ciudad de Homs. Activistas dijeron que murieron más de 200 personas en lo que calificaron como uno de los episodios más sangrientos en la insurrección contra Assad. La ONU dice que han muerto más de 5.400 personas en los últimos 11 meses por la represión del gobierno contra las protestas civiles.
"Es un día triste para este consejo, un día triste para los sirios y un día triste para todos los amigos de la democracia", dijo el embajador francés Gerard Araud después de que la resolución fue vetada.
La embajadora estadounidense Susan Rice señaló que su país estaba "disgustado" por el resultado de la votación.
Araud dijo que Rusia y China se "han convertido en cómplices de una política de represión efectuada por el régimen de Assad".
Siria ha sido un aliado crucial ruso desde los tiempos soviéticos y Moscú se ha opuesto a cualquier llamado de la ONU que pudiera ser interpretado como un apoyo a la intervención militar o a un cambio de régimen. Rusia y China además utilizaron sus poderes de veto como miembros permanentes el consejo en octubre para bloquear un intento previo de occidente para condenar la violencia en Siria.
"Hoy el Consejo de Seguridad ha fallado en estar a la altura de su responsabilidad", enfatizó el embajador alemán Peter Wittig. "El pueblo de Siria ha sido defraudado nuevamente", agregó.
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