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SANTIAGO DE CHILE, Chile, dic. 30, 2011.- Unos 350 brigadistas llegaron al austral parque nacional Torres del Paine para combatir un incendio que en los últimos tres días arrasó con unas 8.500 hectáreas de bosque.
Las autoridades y la fuerza aérea enviaron aviones y helicópteros, pero no han podido operar por las condiciones climáticas imperantes.
"Hasta el momento tenemos más de 8.500 hectáreas afectadas por el incendio y desgraciadamente está creciendo la zona afectada con gran rapidez por las dificultades climáticas y topográficas", informó este viernes el presidente Sebastián Piñera.
Piñera interrumpió su descanso en la residencia veraniega presidencial en el balneario de Viña del Mar para encabezar junto a varios ministros una reunión de coordinación.
Agregó que "la topografía del lugar es extraordinariamente agreste y dificulta enormemente el acceso y el trabajo". Dijo que el fuerte viento ha dificultado también el combate a las llamas. Ráfagas de hasta 120 kilómetros por horas se registran en la zona.
El parque nacional Torres del Paine, de 240.000 hectáreas y a unos 3.100 kilómetros de la capital, es el principal atractivo turístico de la región de Magallanes, en el extremo sur del continente. Anualmente es visitado por unos 150.000 turistas, de los cuales el 75% son extranjeros. Está declarado santuario de la naturaleza y reserva de la biósfera.
El mandatario señaló que los 400 turistas que se encontraban en el parque fueron evacuados preventivamente.
Pronósticos meteorológicos que vaticinaron lluvias para el fin de semana podrían aliviar la situación.
Piñera dijo que probablemente el siniestro fue causado por un descuido y que su gobierno ha pedido la colaboración internacional para combatirlo.
Dos elegantes complejos turísticos están rodeados y amenazados por el fuego.
Por precaución las autoridades dispusieron el cierre del parque, prohibiendo el acceso de turistas.
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