Artículos relacionados »
EL CAIRO, Egipto, nov. 11, 2011.- Al menos 25 personas murieron este viernes en distintas zonas de Siria, la mayoría en la ciudad central de Homs, al reprimir las fuerzas leales al presidente sirio, Bachar al Asad, las multitudinarias protestas, según un grupo opositor.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), que anteriormente cifró en 14 el número total de víctimas, informó en un comunicado de la muerte de 17 personas en Homs, siete en la provincia meridional de Deraa y una en la septentrional de Idleb.
Homs, uno de los principales bastiones de la oposición, es objeto de una dura ofensiva desde hace semanas y, según denunció hoy Human Rights Watch (HRW), el régimen de Al Asad ha cometido en esta provincia crímenes contra la Humanidad.
El informe publicado por HRW cita entre los abusos llevados a cabo los asesinatos ilegales, el uso de armas pesadas contra civiles desarmados y tortura a los detenidos.
El ataque contra Homs se centró hoy sobre todo en el barrio de Al Bayada, donde murieron al menos once personas al irrumpir las fuerzas gubernamentales con vehículos blindados y armamento pesado para reprimir las manifestaciones, que como cada viernes fueron masivas.
Cinco de estas víctimas perecieron por disparos de los cuerpos de seguridad en el marco de una amplia campaña contra activistas opositores.
Esta nueva jornada de protestas fue bautizada por muchos como "Viernes de la congelación de la membresía", en alusión a la petición de los opositores a la Liga Árabe de que suspenda la participación de Siria en la organización en su reunión de mañana.
En cuanto a la situación en Deraa, el OSDH señaló que murieron tres civiles, entre ellos un niño de 13 años, que pereció al estallar una bomba en la aldea Al Musaifara.
Asimismo, cuatro soldados murieron y 15 resultaron heridos en una serie de explosiones contra puestos de control militares en la localidad de Gasim.
El ejército también lanzó una gran ofensiva en Idleb, otro de los feudos opositores, donde entraron con tanques y carros blindados en la ciudad de Jan Shijun.
En esta provincia, tres miembros del ejército y las fuerzas de seguridad resultaron heridos por disparos de hombres armados que se cree que son desertores en un puesto de control en la conflictiva localidad de Maarat el Numan.
Tanto en Idleb como en Homs, los grupos opositores hablan de deserciones masivas por parte de soldados que se niegan a disparar contra los civiles, aunque esto como el resto de los datos no puede ser comprobado de forma independiente por las restricciones impuestas a los periodistas por el régimen de Damasco.
Los militares y las fuerzas de seguridad se han desplegado también en el barrio damasceno de Berza, en Deir el Zur (este) y en Hama (centro), donde han disparado para dispersar las protestas.
Desde mediados de marzo pasado, Siria es escenario de revueltas populares contra el régimen de Al Asad que han causado la muerte de más de 3 mil 500 personas, según las últimas cifras difundidas por Naciones Unidas.
[[order]] [[autor]] escribió el [[time | date DD/MM/YYYY HH:mm]]
[[comment]]