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WASHINGTON, Estados Unidos, sep. 10, 2011.- El presidente de Estados Unidos Barack Obama declaró este sábado a Texas zona de desastre, tras registrar la peor racha de incendios forestales de su historia, con ello el estado recibirá apoyo económico del Gobierno Federal para superar la crisis.
Se estiman que los incendios han arrasado en los últimos días una superficie de más de 22 mil hectáreas y han destruido más de mil 400 viviendas y provocado la muerte de dos personas, una mujer y su hijo.
La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) anunció que la asistencia federal por desastre está disponible para Texas para complementar los esfuerzos de recuperación estatales y locales en el área impactada por los incendios.
Con la declaración del mandatario se autoriza fondos federales para las personas afectadas en el condado de Bastrop.
La asistencia puede incluir subvenciones para vivienda temporal y para reparar la casa, préstamos a bajo costo para cubrir pérdidas de propiedades no aseguradas y otros programas para ayudar a las personas y dueños de negocios a recuperarse de los efectos del desastre.
Kevin Hannes fue asignado como el Coordinador Federal a cargo de las operaciones de recuperación en el área afectada.
Hannes declaró que podrían hacerse designaciones adicionales más adelante si el estado lo requiere y queda evidenciado por los resultados de los estudios preliminares de daños.
Una racha de nuevos incendios forestales, ahora en las cercanías de Houston, amenazaban con prolongar la ola de siniestros más destructiva registrada en la historia de Texas.
El Servicio Forestal de Texas informó que el mayor de los incendios, el Bastrop, ha arrasado desde el pasado domingo más de 14 mil hectáreas de pastizales en una zona ubicada a 50 kilómetros al este de Austin, la capital estatal.
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