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SAN SALVADOR, El Salvador, ago. 30, 2011.- El ex presidente colombiano, Álvaro Uribe, aplaudió este martes a México por enfrentar al narcotráfico y afirmó que "con el crimen no puede haber tregua", porque la única negociación posible es que "se someta a la justicia".
"Desde la comunidad internacional uno aplaude que México haya tenido el valor de reconocer el problema (del narcotráfico) y de enfrentarlo; hay que persistir" en ese combate, señaló Uribe en una entrevista con la cadena Telecorporación Salvadoreña.
"Yo veo en América Latina países que han reconocido ese problema y lo enfrentan", añadió el exgobernante colombiano, quien participa hoy en San Salvador en un foro sobre el papel de los alcaldes en la seguridad ciudadana organizado por una empresa privada.
En ese sentido, Uribe se mostró en desacuerdo con la reciente propuesta del expresidente de México Vicente Fox, de crear en ese país un grupo de expertos que "convoque a los grupos violentos a una tregua" y valore "la conveniencia de una ley de amnistía".
Ante una pregunta sobre lo dicho por Fox, Uribe afirmó, sin mencionar al ex mandatario mexicano, que "la única posibilidad frente al crimen organizado es derrotarlo o que se someta a la justicia", para lo cual "los países tienen su justicia, sus códigos, su sistema de sanciones".
Al referir una frase del pensador italiano Nicolás Maquiavelo -"la tregua no la tomes por generosidad, sino por debilidad; aprovecha para golpear al enemigo"- Uribe reiteró que "con el crimen no puede haber tregua".
Fox hizo su propuesta el pasado viernes a raíz del incendio premeditado de un casino de Monterrey, norte de México, que causó 52 muertos y una decena de heridos y que las autoridades atribuyen al grupo criminal Los Zetas.
El presidente mexicano, Felipe Calderón, lanzó al inicio de su mandato, en diciembre de 2006, un combate frontal al crimen organizado con la participación de miles de soldados, que ha despertado las críticas de varios sectores por el aumento de las denuncias de violaciones a los derechos humanos.
Uribe, cuyo Gobierno (2002-2010) se centró en la política de Seguridad Democrática, basada en la lucha militar contra las guerrillas, dijo ser favorable a una estrategia de "desarticulación" de las organizaciones criminales consistente en combatir a los "cabecillas", tener "generosidad" con quienes quieran salir de esos grupos y "evitar nuevos reclutamientos", en especial de jóvenes.
Agregó que la política hacia los jóvenes debe ser más educación con ingresos económicos y pidió "tener fe en que el crimen es derrotable".
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