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LIMA, Perú, mayo 12, 2011.- Un diez por ciento de los electores peruanos, considerado en las encuestas como el grupo de los "indecisos", decidirá el próximo 5 de junio al nuevo presidente o presidenta del Perú.
Actualmente, Keiko Fujimori y Ollanta Humala se reparten, cada uno, un 40 por ciento de la intención de voto. Otro diez por ciento es el tradicional voto en blanco.
De allí que el 10 por ciento de indecisos, la mayoría de ellos peruanos de clase media, serán el fiel de la balanza en la esperada segunda vuelta electoral.
Un escenario que nadie podía haber imaginado, hasta antes de la primera vuelta electoral del 10 de abril.
"Esta final Keiko-Humala siempre fue indeseable para la mitad de peruanos que no apostamos por ninguno de los dos candidatos, no sólo por razones ideológicas, programáticas o éticas, sino porque sea quien resulte ganador el 5 de junio, abre un período de incertidumbre política y de recelo económico", señala el analista Mario Saldaña en su columna del diario "Correo".
Otro conocido analista e historiador, Antonio Zapata, señala en la página editorial del diario "La República" que las últimas encuestas transmiten la sensación de que Keiko Fujimori está a la alza y que Ollanta Humala ve desvanecerse su pequeña ventaja, razón por la cual insiste en que el líder nacionalista debe seguir mimetizándose con el modelo brasileño, y su ideal Lula Da Silva, y actuar de manera transparente para recuperar credibilidad ante los electores.
ASÍ ESTÁN LAS COSAS
Los principales medios de comunicación "El Comercio", y su holding integrado por dos periódicos y dos canales de televisión, ha decidido promover y defender con uñas y dientes la candidatura de Keiko Fujimori. Entanto que el diario "La República" se inclina por Ollanta Humala.
En este escenario, los organismos defensores de los derechos humanos que bregaron decididamente para acusar y enjuiciar a Alberto Fujimori por delitos de lesa humanidad y violación de derechos humanos, han decidido también dar la cara en esta segunda vuelta electoral.
Así acaban de iniciar la campaña: "Fujimori, nunca más".
Para ellos, la elección de Keiko Fujimori, hija del ex presidente preso y sentenciado a 25 años, sería un suicidio moral para el país.
La campaña "Fujimori,nunca más" no tiene todavía un calendario preciso de actividades, pero consistirá en plantones, vigilias, lavado de banderas y protestas en plazas y calles.
El colectivo de 79 agrupaciones de derechos humanos que busca cerrarle el camino a la presidencia a Keiko Fujimori considera que su eventual elección supondría un grave riesgo para la democracia en el país. "Ella representa a su padre y él es el gobernante más corrupto de la historia del Perú", dijo Rocío Silva, secretaria de los organismos defensores de los derechos humanos.
El ambiente electoral, según analistas, no solo está enrarecido sino que conforme se acerca la fecha de la segunda vuelta, en menos de tres semanas, los ánimos se tornan más violentos y la población se polariza, como no había sucedido anteriormente.
Los inversionistas internacionales se han tomado una pausa, los agentes económicos locales cuentan sus pérdidas en la Bolsa de Valores y hasta los créditos hipotecarios se han retraído, a la espera de lo que pasará el próximo 5 de junio.
Parece increíble, pero los dos candidatos que más resistencias tenían entre los electores peruanos, el ex militar Ollanta Humala, y la congresista Keiko Fujimori, son los que finalmente están disputando el ansiado sillón presidencial de Perú.
Y es que en política como en el fútbol nada está dicho.
Es decir, cualquier cosa puede ocurrir en un campo de juego como en una elección.
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