Jordania busca sus propios cambios

Los jordanos quieren cambios; no hay empleo, los salarios son bajos y la pobreza afecta a miles; el rey elige al primer ministro y los ciudadanos quieren una reforma política que les dé voz y voto

AMMÁN, Jordania, feb. 21, 2011.- Hathem tiene 52 años; sus dos esposas y sus hijos tienen serios problemas para sobrevivir económicamente.

Y  esto es algo que se repite constantemente entre los 6 millones de habitantes de Jordania.

No hay trabajo, los salarios son bajos y como en el resto del mundo árabe, los jordanos quieren cambios. Y  los quieren ya.

"Todo es muy caro y el dinero no alcanza. El agua, la electricidad, la comida. Necesitamos que el gobierno haga algo", dice Hathem Tahir al-Araj.

El desempleo, que está alrededor del 20% en Jordania,  es un serio problema,  la desigualdad, la pobreza y los altos precios impulsan a la gente a buscar cambios. Pero hay quienes dicen que no están listos todavía para una verdadera democracia.

Éste es otro de los cambios que junto con el resto de los países árabes, quiere Jordania.

El Rey Abdullah II tiene aún el poder de escoger al Primer Ministro y muchos quieren una reforma política que dé voz y voto al ciudadano común.

Pero extrañamente, uno de los partidos políticos más importantes, Al-Resala, dice lo contrario.

"Los jordanos no estamos listos para ese cambio. El rey debe seguir teniendo ese poder. La gente debe participar más políticamente, pero para algo así necesitamos tiempo para saber manejar  el cambio", afirma Najeh Al ashqar, Secretario General del Partido Jordano Al-Resala.

Si los jóvenes, que componen la mayoría de la población, no están de acuerdo con esto, y el rey se niega a entregar ese poder, el descontento general en Jordania puede crecer y las consecuencias ser graves, si bien ahora la calma en general se ha mantenido.