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CARACAS, Venezuela, feb. 18, 2011.- El grupo de jóvenes que mantiene una huelga de hambre desde hace 19 días exigió este viernes respeto al Gobierno de Venezuela, rechazaron las acusaciones de injerencia por parte de Estados Unidos en la protesta y aseguraron que están defendiendo los derechos humanos de todos los venezolanos.
El líder del grupo, Lorent Saleh, descalificó en rueda de prensa al ministro de Exteriores venezolano, Nicolás Maduro, al tildar de ridículas sus acusaciones, pero ratificó la voluntad de continuar el diálogo iniciado ayer con el ministro del Interior, Tareck El Aissami, para encontrar una solución a sus demandas.
"Venezuela, el Gobierno bolivariano, debe acatar los tratados internacionales que firmó, los tratados internacionales que como Estado se ha comprometido" a cumplir, dijo Saleh, que desde hace 19 días pide la liberación de 27 supuestos presos políticos y la llegada al país del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza.
Las palabras del coordinador de la opositora Juventud Activa Venezuela Unida (JAVU) se producen después de que Maduro rechazara la reclamación hecha por Estados Unidos para que se permita el ingreso de Insulza y acusara a Washington de querer montar un "Egipto virtual" en su país.
Maduro rechazó también la actuación de Insulza en este caso y aseguró que hay sectores que están tratando de sacar provecho de la protesta de este grupo de "jóvenes de derecha".
"Ratificamos nuestra posición de diálogo, nuestra disposición de reconciliación, no entorpezca señor canciller, le pido que no se meta si va a entorpecer esta posibilidad de que ustedes mismos, como Gobierno, le den un regalo al pueblo Venezuela: que den el primer paso en el respeto a los derechos humanos", dijo Saleh.
El también miembro del grupo Julio César Rivas afirmó que los huelguistas ven "con buenos ojos" la petición de Estados Unidos y subrayó que los derechos humanos no son una cuestión interna del país.
"Este es un tema de derechos humanos, que nosotros reclamamos que en Venezuela se violan", apoyó Saleh.
"Se ve bien ridículo, señor canciller, invocar la soberanía cuando fue usted el chófer del avión de PDVSA donde estaba con (el ex presidente de Honduras, Manuel) Zelaya; con el secretario José Miguel Insulza, pidiendo, invocando, rasgándose las vestiduras para entrar en Honduras", agregó.
Subrayó que ellos defienden "los derechos de todos los venezolanos y no los derechos de los cubanos y de otros países".
Los huelguistas agradecieron la preocupación de El Aissami y pidieron que "así como fue esa conversación de seria y respetuosa, así sea la respuesta de usted no hacia los huelguistas sino hacia los venezolanos".
Entre los 27 presos que los jóvenes consideran "políticos" figuran policías acusados por la muerte de 19 personas durante el golpe de Estado que derrocó a Chávez durante dos días en abril de 2002.
También destacan los diputados electos Biaggio Pilieri, procesado por malversación y cuyo juicio se debe repetir por orden del Tribunal Supremo, y José Sánchez "Mazuco", encausado por homicidio.
Saleh señaló que no están "defendiendo a criminales ni a policías", sino los derechos humanos y aseguraron que no están pidiendo que se viole la Constitución, sino que se respeten los derechos humanos.
"Así como este viernes fueron enérgicamente diciéndonos ultraderechosos, pitiyankis y agentes de la CIA, esperamos que con ese mismo esfuerzo estén trabajando para darnos resultados con respecto a los objetivos que nos hemos planteado",
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