Carmen Montejo, la gran dama del teatro, la radio y la televisión

Pinar del Río, Cuba, fue el lugar que vio nacer en 1925 a María Teresa Sánchez González, mejor conocida como "Carmen Montejo"

CIUDAD DE MÉXICO, México, feb 25-2013.- Pinar del Río, Cuba, fue el lugar que vio nacer en 1925 a María Teresa Sánchez González, mejor conocida como "Carmen Montejo".

A pesar de la inconformidad de sus padres, Carmen demostró desde muy pequeña su vena actoral, bailando y cantando en un programa radiofónico, en su natal Cuba, de donde surgió el mote de "La muñeca".

1941 fue el año en que Carmen Montejo pisó tierra azteca por primera vez.

Encantada por México y proyectos de trabajo, se enganchó a este país y decidió quedarse aquí para siempre.

A la edad de dieciocho años debutó en el cine con la cinta "Resurrección", dirigida por Gilberto Martínez Solares.

Su empeño y talento actoral fueron la llave que le abrió la puerta para actuar en 76 proyectos cinematográficos que se convirtieron en clásicos, tales como "No matarás", "Qué te ha dado esa mujer", "Los hijos de Sánchez", "Los cachorros" y "Nosotros los pobres".

Su arribo a la televisión fue en 1960, gracias a la telenovela "El rapto", dirigida por Jesús Valero.

En este medio participó en 33 melodramas, el último fue "En nombre del amor".

De aspecto amable, Carmen Montejo se transformaba en los escenarios, haciendo suyos los foros teatrales. Lo mismo dio vida a personajes clásicos como "Andrómaca" en la pieza "Las troyanas", "Adela" en "La casa de Bernarda Alba", que deleitó al público con divertidas comedias.

Como reconocimiento a su trayectoria el teatro Tepeyac lleva el nombre de "Carmen Montejo" desde el año 2008.

Fue una mujer de retos y sorprendió al público a sus más de ochenta años al revelar íntimos secretos femeninos en la puesta "Los monólogos de la vagina" último trabajo que realizó la actriz.

"No me quedé anticuada. No me quedé allá atrás. No, no, no. Yo estoy adelante y hoy en día se hacen muchas cosas que, uy decía yo, qué pena que no nací yo en este tiempo" decía Carmen Montejo.

De sangre cubana y corazón mexicano, el encanto de la mujer, el talento de la artista y la historia de Carmen Montejo, seguirán vivos en el cine, el teatro, la radio y la televisión.

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