La visita del presidente chino Xi Jinping a México del pasado 4 al 6 de junio marca el inicio de un nuevo capítulo en las relaciones bilaterales, no sólo porque es una positiva respuesta de Beijing a la visita del presidente Peña Nieto a Hainan en abril pasado donde participó en el Foro Bao para Asia (siete años después de la gira del entonces presidente chino Hu Jintao a México en 2005), sino porque la relación bilateral, tras dos sexenios de adminstración panista, se ha elevado finalmente a la de "asociación estratégica integral".
El mandatario chino reconoció que las coincidencias con el presidente de Mexico sobre el futuro de la relación sino-mexicana deja claro el espíritu de respeto mutuo, un trato basado en la igualdad, y la cooperación bilateral. Respondiendo a las expectativas principalmente de los sectores empresariales de ambas naciones, los resultados de la visita incluyen un comunicado conjunto de 33 puntos, que representa el marco de acuerdo de doce memoranda de entendimiento en las áreas de energía, petróleo, infraestructura, minería, industria, comercio, educación y turismo.
Entre los puntos más destacados está el acuerdo para la creación de un Grupo de Alto Nivel empresarial para explorar oportunidades de comercio e inversión, el compromiso de China de comprar productos mexicanos por un valor de mil millones de dólares, y dos acuerdos entre Pemex y el Eximbank de China y el grupo XinXing Chathay para financiamiento de flota marina de nuestra paraestatal.
Ante todo, el presidente Peña expresó su gran interés en dejar el paradigma de la eventual competencia (característico de la relación bilateral durante los dos sexenios pasados) y de "caminar hacia una sinergia y beneficios mutuos". Otro de los frutos de la visita es una invitación para que el mandatario mexicano realice una visita de estado en 2014, así como la propuesta para que la Cumbre Empresarial China-América Latina se lleve a cabo en 2015 en México.
Entre los temas más relevantes en el ámbito comercial está el acuerdo para generar oportunidades de un comercio menos desequilibrado (el año pasado el comercio bilateral fue de 62 mil millones de dólares, de los cuales solo 9 por ciento fueron exportaciones mexicanas). Entre los muchos productos mexicanos que pueden incursionar en el mercado chino y ayudar a compensar el déficit comercial está el tequila.
El presidente chino anunció que se han girado instrucciones para permitir el acceso de todas las categorías de tequila a China, una decisión importante considerando que, habiendo México producido en 2012 un total de 253 millones de litros, China solo importó 410 mil litros. De acuerdo al Consejo Regulador del Tequila, durante los próximos cinco años se podría exportar a China un total de hasta 10 millones de litros, lo que colocaría a ese país asiático como el segundo importador de la bebida por detrás de Estados Unidos y superando a Alemania, España, Francia, Rusia, Japón, Reino Unido, Canadá, Brasil y Singapur.
Ahora los empresarios tequileros del país esperan que las autoridades mexicanas y chinas implementen los mecanismos necesarios de acceso para la exportación.
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