Las víctimas de la violencia: Los desplazados

Los hechos violentos en Sinaloa han ocasionado que veinticinco mil personas tengan que abandonar sus hogares

CULIACÁN, México, mayo 16, 2013.- La pepena de basura se volvió  su medio de subsistencia. La violencia les obligó a dejar sus casas, su tierra, sus raíces.

Migraron a la ciudad buscando una vida más tranquila,  creyendo que encontrarían mejores oportunidades.

Azucena  se dice afortunada: tiene trabajo y se siente segura. Hace un año que dejó su rancho en la sierra de Sinaloa.

"Estaban matando a la gente, mucha gente armada se miraba y a mí me dio miedo", relató Azucena, una desplazada de Sinaloa.

Con 3 hijos y 30 años de edad, Azucena llegó a Culiacán, una ciudad que no conocía a pesar de ser la capital de su estado.

Fue en el "basurón", como se suele llamar al relleno sanitario, donde Azucena encontró refugio laboral.

Nunca había realizado este trabajo, jamás había estado tantas horas bajo el rigor del Sol, ni había visto tanto zopilote junto.

"Casi no trabajé el primer día, en la sombra ahí como mareada por el mismo olor pero fueron pasando los días y como que me fui imponiendo poco a poco. Cuánto llegas a ganar aquí en un día? cuando gano 100 pesos gané mucho", comentó Azucena.

Para ganar 100 pesos debe pepenar basura alrededor de 10 horas, pero eso no le importa. Dice que prefiere este trabajo, vivir lejos de su tierra, pero vivir en paz.

"Pues es que allá donde estábamos vivíamos con el Jesús en la boca. Nos salimos como quien dice pues a escondidas y todo por miedo. No nos trajimos absolutamente nada, nada más lo que traíamos puesto", dijo, Isabel, hermana de Azucena.

Azucena forma parte de los 25 mil desplazados que ha dejado la violencia en Sinaloa en los últimos cinco años. Los municipios que más han expulsado gente son: Badiraguato, Choix, Sinaloa, Mocorito y San Ignacio

"La bofetada fue muy real: ni la autoridad estuvo al momento, al tanto para atender su llegada ni los organismos estuvimos al tanto para poderlos atender como tal", comentó Leonel Aguirre meza, presidente de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos de Sinaloa

Azucena encontró cobijo en la colonia Bicentenario, ubicada frente al relleno sanitario de Culiacán, donde se respira pobreza.

"Pos vivimos muy apretados porque está muy chiquita la casa... cuando estamos todos aquí casi no cabemos. ¿Hasta cuántas personas en la cama? Hasta 5 o 6 y más cuando hacía frío que no teníamos ni cobijas pues más porque si dormían unos allá y otros acá pues les hacía más frío y ya todos juntos  pues nos cubríamos unos con otros", señaló Azucena

Y es que prefieren vivir incómodos pero seguros, como el resto de sus vecinos, la mayoría desplazados, quienes dudan en regresar por sus cosas.

"Unos de los que habían llegado aquí  de los desplazados fueron por su papelería porque se vinieron sin sus papeles, sin nada, vinieron huyendo de por allá de la sierra regresaron unos por los documentos y ya no volvieron, los mataron en el camino", dijo Enrique Gutiérrez, presidente de la  Cooperativa de Pepenadores "Progreso" de Culiacán, Sinaloa.

El relleno sanitario de Culiacán tuvo que abrir un turno nocturno  para dar trabajo a gran parte de los desplazados por la violencia y es que la pepena se convirtió en el refugio del miedo".

MACO