Por las mañanas era estudiante y por las noches prostituta

Cobraba hasta 1,500 dólares la noche y según ella, lo hacía para pagar sus estudios. Pero esa no fue la causa por la que fue a la cárcel

LONDRES, Inglaterra, julio 12, 2012.- Una joven británica de 29 años, Donna Asutatis, fue encarcelada por 16 meses, pero este caso fue distinto a cualquier otro: Asutatis llevaba alrededor de 8 años dedicándose a la prostitución, cobrando hasta 1,500 dólares la noche. La policía estima que entre el 2005 y 2007, tuvo ganancias de más de 500 mil dólares. Pero la joven no fue puesta tras las rejas por su oficio, sino por no pagar impuestos.

DEPARTAMENTO DE LUJO

Donna Asutatis se dedicaba a dar compañía a hombres de negocios, y por ello cobraba grandes cantidades por sus servicios. Cuando la policía registró su departamento, encontró más de 100 mil dólares en efectivo, así como joyas que sus clientes le daban como regalo. En la corte, Asutatis lloró cuando vio que sus padres se encontraban ahí, ya que ignoraban a que se dedicaba su hija. La joven dijo que se había hecho prostituta para pagarse la universidad, aunque al parecer los lujos que podía darse al tener tanto éxito le hicieron seguir prostituyéndose. Entre otras cosas, Asutatis se había comprado un departamento de lujo en Kensington, una de las zonas más exclusivas de Londres, pagando incluso un depósito en efectivo de casi 150 mil dólares.

Donna Asutatis no fue castigada por su oficio, ya que operaba dentro de la ley, es decir, trabajaba sola y en un lugar privado (su casa o la de sus clientes). Su abogado, Stan Reiz, añadió que 'desde que todo esto ha salido a la luz, (Donna) ha sufrido de depresión e incluso ha abandonado la maestría que había comenzado'.

PERO NO ES LA UNICA

Ya por varios años ha existido la preocupación en Reino Unido, por universitarias que optan por la prostitución para pagar sus colegiaturas. En el 2011, la Asociación Nacional Estudiantil (NUS) publicó un estudio en donde afirmó que estudiantes, incluso de edades más jóvenes, se dedican a vender sus cuerpos. Se sabe de casos donde, desesperados por conseguir dinero, comienzan a apostar o toman parte en experimentos médicos. Aunque naturalmente es imposible tener cifras exactas de estudiantes que se dedican a la prostitución, se ha llegado a estimar que hasta un 20% de las bailarinas exóticas de bares y clubs son estudiantes. Por otra parte, un estudio hecho por la Universidad de Kingston, encontró que el número de estudiantes que conocen a alguien que se dedica a la prostitución se había elevado de un 3% a un 25% en sólo 10 años.