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LONDRES, Inglaterra, abr. 2, 2012.- En un programa de prueba que ha resultado controversial, cientos de mujeres británicas embarazadas están siendo medicadas para tratar de evitar que sus hijos nazcan con sobre-peso.
El estudio, considerado el primero en su tipo en el mundo, se debe sobre todo a que el número de bebés en Gran Bretaña con un peso mayor al de 5 kilogramos se ha disparado en un 50% en los últimos 15 años.
Las 400 mujeres que están tomando parte en el programa sufren de un sobre-peso considerado peligroso, y ya están tomando medicinas para prevenir la diabetes.
Los doctores detrás de la idea insisten en que la obesidad en las mujeres británicas embarazadas está alcanzando proporciones epidémicas y que se necesita actuar ahora para proteger la salud de los bebés del mañana.
Cuatro ciudades están tomando parte: Liverpool, Edimburgo, Sheffield y Coventry, pero si los resultados de esta prueba son considerados exitosos, bien podría ser usado en todo el país para el 2017.
¿Por qué medicina contra la diabetes? Los bebés con sobre-peso tienen el doble de probabilidad de convertirse en adultos obesos, mientras que las mujeres obesas que se embarazan producen más insulina que aquellas que no lo están.
Se espera que al tomar una medicina contra la diabetes, se reduzcan los niveles de insulina de la madre y se redistribuya la grasa del bebé, tanto en el hígado como en otros órganos.
Las críticas no se han hecho esperar, argumentando que no debe medicarse a una mujer embarazada por un problema que bien puede tratarse con cambios en la dieta y ejercicio.
La profesora Jane Norman, de la Universidad de Edimburgo en Escocia, y que está al frente del programa, dice que 'nos enfrentamos cada vez más al problema de mujeres que se embarazan sufriendo ya de sobre-peso. Si en este momento les decimos que deben comer menos y ejercitarse no ayuda en mucho'.
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