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WASHINGTON, EU, mar. 28, 2013.- El número de estadounidenses que presentaron nuevas solicitudes de subsidios por desempleo subió más de lo esperado la semana pasada, pero probablemente no lo suficiente como para sugerir que la recuperación del mercado laboral está vacilando.
Otro informe publicado mostró que la economía estadounidense se expandió a un ritmo débil en el cuarto trimestre del 2012, aunque una fuerte alza en la inversión empresarial y mayores exportaciones de servicios llevaron al Gobierno a elevar su estimación previa de crecimiento.
El Departamento del Trabajo dijo que las solicitudes iniciales de subsidios por desempleo aumentaron en 16,000 a una cifra desestacionalizada de 357,000. Pese al alza, se encontraban en la mitad de su rango para este año.
Los futuros de las acciones estadounidenses recortaron ganancias brevemente tras la divulgación de ambos informes.
El promedio móvil de cuatro semanas para nuevas solicitudes, que mide mejor las tendencias del mercado laboral, subió en 2,250 a 343,000. Aún así, para muchos economistas una lectura de la tendencia menor al nivel de 350,000 apunta a un ritmo firme de contrataciones en marzo.
Se prevé que en reporte del Gobierno que será divulgado el 5 de abril muestre que los empleadores crearon 197,000 puestos de trabajo en sus nóminas en marzo. Eso sería menor que durante el mes previo, pero aún sugeriría que una recuperación en el mercado laboral está ganando impulso.
Pese a una reciente aceleración de las contrataciones, la Reserva Federal ha parecido preocupada de que el endurecimiento fiscal por parte del Gobierno pueda entorpecer el avance logrado en el mercado laboral.
La semana pasada, las ridades prometieron que mantendrán sus compras de bonos a un ritmo mensual de 85,000 millones de dólares hasta que el panorama del mercado laboral mejore sustancialmente.
"La tendencia subyacente de crecimiento está mostrando algunas señales alentadoras, pero el riesgo clave es cuánto endurecimiento fiscal veremos este año", comentó Laura Rosner, economista de BNP Paribas en .
Una serie de datos recientes han mostrado que la economía está ganando fuerza. Las ventas minoristas han sido más sólidas a lo esperado, la producción manufacturera ha crecido y el crecimiento del empleo se ha acelerado.
La tasa de desempleo cayó a 7.7% en febrero desde 7.9% en enero.
POCO MAS DE CRECIMIENTO
En otro informe, el Departamento de Comercio de Estados Unidos dijo que el Producto Interno Bruto (PIB) se expandió a una tasa anual de 0.4% en los últimos tres meses del 2012, justo por debajo del avance de 0.5 por ciento pronosticado por analistas.
La tasa de crecimiento fue la más lenta desde el primer trimestre del 2011 y lejos de lo que se necesita para alimentar una caída más rápida de la tasa de desempleo.
Sin embargo, fue mayor que la estimación previa del Gobierno de una tasa de crecimiento de 0.1 por ciento.
Buena parte de la debilidad provino de una desaceleración en la acumulación de inventarios y de una fuerte caída en el gasto militar. Se prevé que esos factores se reviertan en el primer trimestre de este año.
En comparación, el gasto del consumidor fue más robusto, aunque sólo se expandió a una tasa anual de 1.8%. Ese fue un ritmo de crecimiento más lento a lo estimado previamente por el Gobierno.
El gasto de los hogares alimenta cerca de 70% de la producción nacional y el aún débil ritmo de crecimiento sugiere que el impulso subyacente en la economía fue bastante modesto al entrar al primer trimestre, cuando entraron en vigor una serie de medidas de austeridad fiscal.
El reporte del jueves es la tercera estimación de crecimiento del Gobierno para los últimos tres meses del 2012. En su primera estimación, las ridades impactaron a los economistas al decir que la economía se había contraído a una tasa anual de 0.1%.
El informe del jueves mostró que las razones para el bajo ritmo de la actividad económica fueron mayormente las estimadas inicialmente.
Los inventarios restaron 1.52% de la tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) durante el período, una presión un poco menor que en la segunda estimación, publicada el 28 de febrero.
El gasto en defensa se hundió a una tasa de 22.1%, recortando 1,28 puntos del crecimiento tal como en la estimación previa.
Sin embargo, hubo puntos positivos. El informe mostró que la inversión empresarial subió a una tasa de 13.2%, un mayor incremento a lo estimado inicialmente. El crecimiento extra se debió mayormente a que las empresas gastaron más en construcción.
KRL
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