WASHINGTON, Estados Unidos, feb. 21, 2013.- Más estadounidenses presentaron nuevas solicitudes de subsidios por desempleo la semana pasada, la actividad fabril se desaceleró en febrero y los precios al consumidor se mantuvieron planos en enero, en hechos que respaldan el argumento de la Reserva Federal para mantener su postura de política monetaria ultra expansiva.
Los reportes fueron divulgados tras señales de división dentro de la Fed por su programa de compras de bonos que apunta a estimular la lenta recuperación económica.
"Si la Fed está buscando evidencias para mantener su pie en el acelerador respecto a la política (monetaria), aún la están obteniendo", dijo Jim Baird, estratega jefe de inversiones de Plante Moran Financial Advisors en Kalamazoo, Michigan.
Las solicitudes iniciales de subsidios por desempleo subieron en 20,000 la semana pasada, a una cifra desestacionalizada de 362,000, dijo el Departamento del Trabajo.
La oficina dijo en un segundo informe que los precios al consumidor se mantuvieron planos por segundo mes consecutivo en enero debido a que los precios de la gasolina cayeron y los costos de los alimentos se mantuvieron sin cambios tras varios meses de alzas.
En los 12 meses hasta enero, los precios al consumidor subieron 1.6 por ciento, la menor alza desde julio. En enero, avanzaron 1.7 por ciento.
Las preocupaciones sobre el débil crecimiento del empleo llevaron al banco central estadounidense a iniciar un programa de compras de bonos de fin abierto.
La Fed dijo que mantendrá el programa, que espera que reduzca los costos del crédito, hasta que vea una mejoría sustancial en el panorama para el mercado laboral. También se ha comprometido a mantener tasas de interés cercanas a cero hasta que el desempleo alcance 6.5 por ciento, siempre y cuando la inflación no amenace con superar el 2.5 por ciento.
Sin embargo, las minutas de la reunión de política monetaria del 29 y 30 de enero publicadas el miércoles mostraron que algunos integrantes de la Fed creen que el banco central podría tener que frenar o suspender las compras de activos antes de ver una aceleración en el crecimiento del empleo debido a preocupaciones sobre el costo del programa.
El presidente de la Fed de Dallas, Richard Fisher, dijo que el banco central necesitará eventualmente reducir su programa de alivio cuantitativo más que detenerlo y que probablemente sería mejor hacerlo este mismo año.
Fisher dijo que las políticas de este tipo no se modifican de la noche a la mañada ni de manera radical, sino que se debe hacer de manera gradual.
Añadió que sería preferible iniciar el desmantelamiento del programa de compra de bonos "antes que después".
"Deberíamos comenzar a disminuir esto a medida que el desempleo disminuya", dijo Fisher en entrevista con Reuters. "Si la economía sigue mejorando, yo personalmente esperaría que eso ocurra en algún momento de este año".
El mes pasado, la Fed optó por mantener la compra de bonos en 85,000 millones de dólares, pero las minutas dejaron en evidencia la ansiedad sobre los potenciales riesgos de esa estrategia.
DESACELERACIÓN DE MANUFACTURAS
El índice de actividad fabril de la Fed de Filadelfia cayó a -12,5 en febrero, su menor nivel desde junio. El índice, que mide la actividad fabril en la región norte de la Costa Este de Estados Unidos, bajó a -5,8 en enero.
Una lectura menor a cero indica contracción en el sector manufacturero de la región. El sondeo cubre a fábricas en el este del estado de Pensilvania, en el sur de Nueva Jersey y en Delaware.
El ritmo del crecimiento de las manufacturas de Estados Unidos se desaceleró en febrero, pero permaneció cerca de un máximo nivel en nueve años, gracias a una fuerte demanda interna, mostró un informe de la industria divulgado el jueves.
La firma de servicios de información financiera Markit dijo que su índice preliminar de Gerentes de Compra (PMI) para el sector manufacturero cayó a 55,2 este mes desde 55,8, que fue su mejor lectura desde abril del 2012. Una lectura superior a 50 indica expansión.
La economía general estadounidense se contrajo un 0,1 por ciento en el cuarto trimestre, pero creció un 2,2 por ciento en el 2012.
Las acciones estadounidenses caían el jueves por la mañana, mientras que los precios de los bonos del Tesoro subían. El dólar estadounidense avanzó contra una canasta de monedas tras reportes de débiles datos económicos en Europa.
El crecimiento del empleo en Estados Unidos ha sido mucho menor que el mínimo de 250.000 puestos de trabajo por mes en un período de tiempo sostenido que los economistas dicen que se necesita para reducir significativamente la cifra de desempleados.
La tasa de desempleo subió un 0,1 por ciento en enero, a un 7,9 por ciento.
Pese a todo, existen algunos motivos para el optimismo sobre la economía estadounidense. La recuperación del mercado inmobiliario está ganando impulso.
Un quinto informe de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por su sigla en inglés) mostró que las ventas de casas usadas subieron un 0,4 por ciento el mes pasado, lo que llevó a la oferta de casas en el mercado a un mínimo nivel en 13 meses. El precio promedio de las casas subió un 12,3 por ciento interanual.
Los crecientes valores de las casas deberían ayudar a respaldar el gasto del consumidor.
Aunque los precios al consumidor excluyendo alimentos y energía subieron un 0,3 por ciento -la mayor alza desde mayo del 2011-, la mayor parte de ese incremento se debió a los costos de las vestimentas. Los economistas no creían que esto fuera el inicio de una nueva tendencia.
"La inflación subyacente continúa respaldando mucho a la postura de política expansiva de la Fed", dijo Millan Mulraine, un economista senior de TD Securities en Nueva York.
(Con informacion de Reuters)
TFO
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