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CIUDAD DE MÉXICO, México, ene. 10, 2013.- En el segundo día del Foro México 2013 "Políticas públicas para un desarrollo incluyente" el secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet aseguró que el gran problema del desempleo de los jóvenes recién egresados de la educación superior se debe a la escasa información con la que cuentan los jóvenes para desarrollar una vocación profesional específica.
"El 54% de los mexicanos se abocan a 5 o 6 carreras profesionales", en la educación media superior 7 de cada 10 egresados coinciden en la misma área laboral.
También existen fallas en los programas y planes de estudio, pues hay una escasa vinculación entre las instituciones educativas y el sector laboral.
Durante su participación en el panel "Educacio?n y formacio?n de capacidades para el trabajo productivo" comentó que el 40% de los convenios que se celebran entre universidades y empresarios, son verbales, de manera que su cumplimiento queda sujeto a la posibilidad de los contratantes para llevarlos a cabo. De este modo, el 14% de los desempleados en México son menores de 25 años, que aceptan ingresos precarios y el 25% de este grupo carece de prestaciones sociales.
Gabriela Ramos, directora del Gabinete de la OCDE y Sherpa ante el G20 comentó que en la última década México ha aumentado 30% el presupuesto del gasto educativo, con grandes avances sobre todo en preescolar y secundaria.
Los países con mejores resultados educativos son los que alinean todos los instrumentos centrados en el alumno; se requiere de maestros talentosos y líderes escolares bien preparados, pues contratar a un mal maestro, condena a una mala educación durante 30 años. Debe existir transparencia en la asignación de plazas de maestros y directores.
Wendy Cunningham, líder del sector de desarrollo humano para México y Colombia, BM asegura que una buena formación académica no es suficiente, hace falta también vigilar las competencias de comportamiento.
La formación empieza desde el nacimiento y continúa a lo largo del ciclo de vida y explica que compartir sus juguetes, resolver conflictos en el arenero, esperar la hora de desayuno, se traducen con comunicación, paciencia y trabajo en equipo en el mercado laboral.
Sugiere un plan de acción para cada etapa de la vida, coordinación y planeación interinstitucional (entre universidades y empresas), así como planes para profesionalizar al docente, otorgando el apoyo necesario a los docentes para enseñar a sus estudiantes.
Carmen Pagés-Serra, jefa de la Unidad de Mercado Laboral, BID considera que el factor determinante en el nivel de vida de los mexicanos es la productividad en el trabajo, por lo que se debe mejorar la calidad y pertinencia del sistema educativo, siendo enfáticos en la educación media, media superior y superior.
También dijo es muy importante mejorar las competencias de la fuerza laboral que ya está empleada, por lo que sería necesario crear programas de cofinanciación para capacitación, sobre todo en las pequeñas y medianas empresas.
Recomienda involucrar al sector productivo en las decisiones que se tomen en la educación; descontinuar carreras profesionales, así como identificar y registrar competencias laborales.
Alejandro Cheyne García, rector de Uniempresarial, Colombia, habló sobre su experiencia dónde los empresarios son protagonistas en el proceso para lograr una mejor educación. Los empresarios son quienes definen los planes de estudio.
Asegura que sus egresados cuentan con un salario progresivo para financiar sus estudios y son los mejores pagados en el mercado laboral y durante sus estudios universitarios desarrollan competencias en la teoría y en la práctica.
KRL
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