La crisis europea prevé el fin de la globalización: Zedillo

Un quebranto de la unión monetaria europea puede destruir el mercado común europeo, y una regresión que llevará al principio del fin de la globalización

CIUDAD DE MÉXICO, México, nov. 7-2012.- El ex presidente de México, Ernesto Zedillo, advirtió que existe el "riesgo de un quebranto total de la unión monetaria europea", que de ocurrir daría paso al principio del fin de la globalización moderna, lo que sería muy negativo para América Latina.

"Son tormentas que están ahí y que pueden convertirse en huracanes", y de ahí la importancia de que los países latinoamericanos se preparen con un sentido urgente, aun cuando todo en el mundo salga bien, destacó durante su participación en la Primera Sesión Plenaria del Consejo Nacional Banorte-IXE.

Zedillo, actual director del Centro de Estudios de la Globalización y profesor de economía y política internacional en la Universidad de Yale, sostuvo que un quebranto de la unión monetaria europea también puede destruir el mercado común europeo, y habría una regresión que podría llevar al "principio del fin de la globalización moderna como la conocemos hoy y países como los de América Latina sufriríamos mucho".

Esto se suma a la compleja situación que enfrenta Estados Unidos por los problemas fiscales que de no resolverlos afectará fuertemente, aunque consideró que esa economía tiene una privilegiada situación por tener la principal divisa del mundo que le permite tener financiamiento abundante y barato junto a enormes márgenes de libertad en su política monetaria y fiscal.

Zedillo Ponce de León comentó que ciertamente los países latinoamericanos están satisfechos por los esfuerzos realizados en muchos años para dejar de ser "las ovejas negras" de la economía internacional, pero al mismo tiempo hay que tomar las precauciones necesarias.

Ello aun cuando la unión monetaria europea no se colapse, Estados Unidos logre los acuerdos políticos que les permitan enfrentar sus problemas fiscales de corto, mediano y largo plazo, que haya un reequilibrio armonioso en China, y que el G-20 "se vuelva en algo que sirva y no sea algo inútil como desgraciadamente ha sido hasta ahora".

Por su parte, el ex presidente de Chile, Ricardo Lagos, coincidió en que los países de América Latina deben de ser precavidos ante la complejidad del entorno económico mundial, pues consideró que todavía está lejos de encontrarse la ruta poscrisis.

Manifestó que se ve un mundo complejo, por los problemas que enfrenta Estados Unidos, así como las dificultades de la zona euro, y la incertidumbre sobre si continuará la desaceleración de China.