CIUDAD DE MÉXICO, México, oct. 22-2012.- Hablar de dinero, generalmente genera conflicto y más cuando se trata de una pareja, ya que tocar este tema equivale a hablar de poder.
Tere Díaz, psicóloga, aclara que es necesario tener conciencia de cuánta autonomía económica tiene cada integrante de la pareja, "porque se hace mucho más complicado si dependo de la otra persona con la que voy a tener la conversación".
En cuestiones de pareja, se recomienda analizar si hay alguien que tiene más o menor poder, o si existe igualdad, ya que esos factores marcan la diferencia.
El que tiene más poder manda, dice, propone, toma las decisiones de qué se va a hacer o cómo se va a administrar, "es una manera incluso de demostrar amor, complacencia, un sentimiento y eso altera muchísimo el diálogo amoroso, porque alguien se posiciona en una postura dependiente o subordinada del otro", afirma la especialista.
Es importante saber con qué tipo de persona se establece la relación, si la pareja va a aportar todo el capital económico o si ambos integrantes estarán a la par y desde allí tendrán que negociar.
De dinero se tiene que hablar y poner las cartas sobre la mesa, para poder hacer elecciones primarias, por ejemplo: si manejarán cuentas comunes, cuentas separadas, quién va a pagar tal cosa o si se van a repartir los gastos en porcentajes, de acuerdo con sus ingresos.
Tere Díaz recomienda sentarse a dialogar de este asunto con toda seriedad. "No es un tema de pasillo y no darle el significado que tiene genera mucho mayor conflicto".
Sin duda es un tema complejo, pero si no se trata eso puede generar hasta la ruptura de la pareja.
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