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TOKIO, Japón, oct. 5, 2012.- El Banco de Japón decidió que no seguirá con una política de expansión monetaria pese a la creciente presión política para que se recupere la tercera mayor economía del mundo, y mantuvo sus tasas de interés en 0.1%.
La actividad económica en Japón se está paralizando, reconoce el banco central en un comunicado emitido tras dos días de reuniones sobre política monetaria.
"Las exportaciones y la producción industrial han sido relativamente débiles debido a que las economías extranjeras han entrado más profundamente en una fase de desaceleración", añade la entidad.
"Por otra parte, la demanda doméstica se mantiene, apoyada sobre todo en la demanda relacionada con la reconstrucción" tras el terremoto y el tsunami que vivió el noreste de Japón el año pasado, señala.
El banco ha enfrentado presiones para que estimule la economía después de que el principal índice sobre el consumo en el país, que excluye los alimentos frescos, cayera 0.3% en agosto en comparación con el año pasado. Es además el cuarto mes consecutivo de retroceso.
A mediados de septiembre, la entidad había decidido expandir un programa de compra de activos de 70 a 80 billones de yenes (1.020 millones de dólares).
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