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BRUSELAS, Bélgica, oct. 2, 2012.- Un grupo asesor de la Unión Europea, dijo que los bancos deberían separar sus operaciones de captación de depósitos de las operaciones con fondos propios y otros negocios de inversión riesgosos para proteger a los contribuyentes de eventuales rescates a los prestamistas y resguardar a los ahorristas.
El reporte también apunta a los riesgos de los préstamos relacionados al mercado hipotecario y recomienda que sean respaldados por mayores reservas de capital.
El grupo de expertos fue convocado por la Comisión Europea para examinar las estructuras de los bancos y es liderado por el gobernador del Banco de Finlandia, Erkki Liikanen.
Aunque las recomendaciones no son vinculantes, podrían impulsar al ejecutivo de la UE a diseñar nuevas regulaciones.
"El grupo ha concluido que es necesario solicitar una separación legal de ciertas actividades financieras particularmente riesgosas de las captaciones de depósitos de los bancos dentro de los conglomerados bancarios", dijo el reporte.
"Las actividades a ser separadas incluirían las transacciones con fondos propios de valores y derivados y algunas otras muy estrechamente vinculadas con los mercados de valores y derivados", añadió.
Las recomendaciones, muchas de las cuales ya están siendo implementadas en Gran Bretaña para defender a la banca minorista y en Estados Unidos para limitar las apuestas en los mercados con fondos de los propios bancos, también respaldan la idea de un mecanismo para traspasar las pérdidas a tenedores de bonos en caso de un rescate bancario o un colapso.
El grupo de Liikanen sugirió que los directivos bancarios deberían aceptar este tipo de bonos como parte de sus pagos extraordinarios.
"Este reporte alimentará nuestras reflexiones sobre la necesidad de medidas futuras", dijo Michel Barnier, comisario de la Unión Europea a cargo de aspectos regulatorios.
"Consideraré ahora cuáles son los pasos siguientes, en los que la comisión analizará el impacto de estas recomendaciones sobre el crecimiento y sobre la seguridad e integridad de los servicios financieros", añadió.
Si se aplican disposiciones nuevas sobre las inversiones de riesgo, varios bancos europeos podrían resultar afectados, entre ellos el británico Barclays, el alemán Deutsche Bank y el francés BNP Paribas, que tienen operaciones transversales en diferentes áreas.
Después de los desastrosos efectos del colapso del mercado inmobiliario en España, Irlanda y otros países que desataron las complicaciones para los bancos, el grupo recomendó considerar cargos específicos de capital para coberturas de riesgos asociados a las hipotecas en los libros de los prestamistas.
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