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MADRID, España, sept. 28, 2012.- Los Presupuestos Generales del Estado para 2013 y 2014 que presentó el Gobierno son, a la vista de los analistas, los únicos que podía presentar si España quiere que la Unión Europea le ayude.
El Gobierno de Mariano Rajoy recorta por todos lados: educación, cultura, sanidad, infraestructuras. Incluso en la seguridad y en la defensa del país. Sólo se libran los jubilados que, de momento, no les tocan sus pensiones.
Consecuencias indeseables
Es verdad que Europa ve con muy buenos ojos estas nuevas reformas del Gobierno de Rajoy. Sin embargo, no todos lo ven igual. La opinión pública española esta cada vez más indignada. De hecho, no hay mas que ver las manifestaciones. Diariamente hay decenas por toda España. Muchas son espontáneas. Otras, no tanto como la ocurrida a principios de semana frente al Congreso de los Diputados donde varios miles de personas se manifestaron en contra de la clase política.
Los efectos de las reformas pueden ser indeseables. Todo es más caro mientras continúan los despidos y aprietan al ciudadano español a base de impuestos tanto directos como indirectos.
El Gobierno de Rajoy insiste en que va a seguir por ese camino independientemente de lo que opinen los trabajadores españoles.
España se suma así a la grave situación económica que están viviendo los países ribereños europeos empezando por Grecia y terminando en Portugal.
¿Para cuándo el rescate?
Estos presupuestos que ha anunciado el Gobierno, van a servir fundamentalmente para tapar los agujeros del déficit. Sin embargo el rescate financiero español sigue planeando permanentemente. El Presidente Rajoy quiere hacer tiempo. Primero porque hay elecciones en el País Vasco y Cataluña y el Partido Popular podría perder muchos votos. Además porque España pretende dar confianza a los mercados con las últimas reformas de Rajoy. Veremos que dicen los mercados.
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