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CIUDAD DE MÉXICO, México, dic. 24, 2012.-Al celebrar la tradicional misa de Navidad, el cardenal Norberto Rivera Carrera llamó a vivir esta fiesta con esperanza y fe, que el nacimiento del Jesús sea un compromiso para trabajar con fuerza en la edificación de México, tan golpeado por la violencia y el hambre.
Asimismo el arzobispo primado de México llamó a privilegiar la fe y no el consumismo; "en todas las ciudades vemos luces, suplementos de prensa que nos invitan a comprar, posadas que se convierten en grandes fiestas sin ningún sentido sobrenatural. Parece que hemos puesto el centro de la Navidad en el consumo y no en la fe".
En la Catedral Metropolitana, Rivera Carrera advirtió que el consumo no produce paz, mientras que "la fe nos descubre el maravilloso misterio de nuestra salvación y del amor insondable de Dios que se hace niño indefenso por nosotros".
Navidad, anotó en su homilía, es nacimiento y muchas cosas nacen en esos días. "Nace el ser humano, un nuevo ser humano que ahora es ante todo hijo de Dios. En la Navidad, Dios se acerca a cada hombre, rico o pobre, sabio o necio, sano o enfermo.
"Se acerca a cada uno y le interpela abriéndole un camino de felicidad. Dios se hace hombre para hacer al hombre Dios, para acercarlo al amor que nunca falla", señaló el prelado. En este marco, afirmó, Navidad es esperanza.
"Cuando apenas estamos comenzando un milenio y parecen encontrarse una vez más las dos posturas que han dividido a la humanidad: el infundado optimismo milenarista y el pesimismo apocalíptico, el niño de Belén sabe que la redención que nos trajo debe transmitirse a todos los hombres a través de los hombres que son corresponsables de esa salvación que él nos trae", agregó.
RAMG
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