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CIUDAD DE MÉXICO, México, sep. 13, 2011.- En punto de las dos de la tarde, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, salió de sus oficinas en el Antiguo Ayuntamiento y acompañado del dirigente del SME, Martín Esparza, se trasladaron al Zócalo capitalino.
La Plaza de la Constitución ya lucía vacía a esa hora de las carpas que sirvieron al plantón de los electricistas.
En una improvisada ceremonia, el dirigente del Sindicato Mexicano de Electricistas le dijo a Marcelo Ebrard que entregaban la Plaza de la Constitución a la Ciudad de México para que pudieran celebrarse los festejos de la Independencia, ya que se había establecido en la Secretaría de Gobernación (Segob) una mesa de trabajo seria para que se escuchen las demandas de los electricistas.
El jefe de gobierno agradeció a los integrantes del SME el haber desocupado la Plaza de la Constitución y confió en que las negociaciones que se desarrollen en la Secretaría de Gobernación concluyan con una solución definitiva al conflicto de los electricistas.
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