Tiene DF cerca de 40 mil adictos crónicos a una droga

Asegura director del IAPA que de esos 40 mil adictos crónicos sólo seis mil llegan a servicios de rehabilitación

CIUDAD DE MÉXICO, México, Jun. 24, 2011.-En la capital de la República Mexicana existen cerca de 40 mil personas adictas crónicas a una droga, señaló  Simón Tavera Romero, director ejecutivo de Prevención del Instituto para la Atención y Prevención de Adicciones en la Ciudad de México (IAPA).

Tavera Romero señaló que la delegación Iztapalapa es la de mayor índice de narcodependientes, de las 16 entidades políticas que conforman el Distrito Federal, con cerca de ocho mil adictos.

El funcionario indicó lo anterior en el marco del primer foro "Redes que Previenen, Redes que Protegen", que se celebró en el auditorio "Gustavo Baz Prada" del Palacio de la Antigua Escuela de Medicina de la UNAM, en el marco del Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas 2011.

El investigador resaltó que de esos 40 mil adictos crónicos que existen en la capital solamente seis mil de ellos llegan a servicios de rehabilitación, mientras que los 34 mil restantes no tienen acceso a una mejora de vida.

Indicó que la delegación política con menos adictos crónicos es Milpa Alta, con 569, y que 50 por ciento de los farmacodependientes consumen alguna droga en sus moradas, mientras que 26 por ciento lo hace en la calle y solamente tres por ciento en las escuelas.

Apuntó que el objetivo del Instituto para la Atención y Prevención de Adicciones en la Ciudad de México (IAPA) es la promoción de comunidades saludables en los grupos vulnerables, ya que la rehabilitación de los adictos es muy cara, y se evita con la detección oportuna y eficaz de los grupos de riesgo.

Señaló que con la ingesta precoz de alcohol y tabaco, drogas llamadas legales, se genera que haya una tendencia a consumir otras sustancias psicotrópicas.

Finalmente, comentó que más de cuatro millones de mexicanos consumen alguna droga en el país, siendo la población de 12 a 17 años la más vulnerable y la que pasa a ser parte de las estadísticas de adictos crónicos.